Hay que empezar diciendo que estos huevos rellenos con chorizo están riquísimos, porque eso es lo más importante en una receta ¿A que sí?
Después podemos decir que el huevo es uno de los alimentos más completos que hay, porque aparte de todas las propiedades que os cuento abajo, es muy versátil, ya que los podemos preparar de infinitas formas, en recetas para todos los gustos, en salado como cocidos, en guisos, al horno, en revueltos… En dulce es imprescindible en la preparación de bizcochos, cremas dulces… Por lo que es perfecto para utilizarlo tanto en dulce como en salado.
Información nutricional:
El huevo es rico en proteínas de alto valor biológico, porque contiene aminoácidos esenciales para el organismo.
Ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados como Omega3.
Contiene todas las vitaminas excepto la C.
Rico en Hierro, Calcio, Zinc.
Es antioxidante.
Lo único malo es que contiene colesterol, pero consumido en su justa medida es un alimento excepcional. Pero aparte del colesterol, como he dicho antes para mi es uno de los alimentos más completos que hay.
Cómo preparar los huevos rellenos con chorizo:
Cortar el chorizo en trozos lo más pequeños posible
Cocer los huevos en abundante agua durante 10 minutos.
Cuando estén fríos pelar y cortar en dos mitades a lo largo.
Retirar la yema, aplastarla con un tenedor y envolver el chorizo cortado.
Rellenar con esta mezcla la clara, repartir bien toda la mezcla en todos los huevos.
Cómo preparar la bechamel:
Podéis visitar mi receta de cómo preparar la bechamel perfecta sin grumos.
Echar el aceite en una sartén o cazo y cuando esté caliente añadir la harina.
Dejar cocinar la harina a fuego lento unos dos minutos.
Añadir la leche poco a poco, echar la sal a gusto.
Dejar cocer 10 minutos a fuego lento removiendo de vez en cuando.
Echar una cucharada de bechamel encima de cada huevo relleno.
Colocar en una bandeja y dejar enfriar bien la beschamel.
Pasar sólo la parte de la bechamel por huevo batido y pan rallado.
Freir en abundante aceite de oliva virgen, pero sólo la parte de la bechamel.
Sacar sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Fuente: este post proviene de Mi Querida Cocinera, donde puedes consultar el contenido original.
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