El hummus en uno de los platos más populares dentro del mundo árabe. Oriente Medio, Israel, Turquía, Siria, Grecia, Chipre, Líbano. son muchos los países donde este entrante se prepara desde siempre. Parece ser que el origen de esta forma de preparar los garbanzos se encuentra en el Antiguo Egipto, se sabe del consumo humano de los garbanzos desde hace más de 7.000 años.
Se trata de una receta sumamente sencilla que da como resultado una crema absolutamente de lujo que suele servirse fría, perfecta para un aperitivo o para servir de acompañamiento, disfrutada siempre con pan para mojar, preferiblemente de pita, o incluso verduras en crudo cortada en bastoncitos, zanahorias, calabacín.
Entre sus ingredientes, además de los garbanzos, está la pasta de tahina, una crema a base de semillas de sésamo con sal que forma parte de este plato como ingrediente insustituible. Hoy en día podemos encontrar esta crema de sésamo en cualquier herboristería sin ninguna dificultad.
Aunque no era la primera vez que lo probaba, si fue la primera en que lo preparé en casa y prometo repetir, nos ha encantado a todos, una maravilla de plato.
RACIONES: 4-6
DIFICULTAD: baja
TIEMPO: 15 minutos
HUMMUS:
250 gr. GARBANZOS
ZUMO 1 LIMÓN
1 DIENTE DE AJO PEQUEÑO
SAL
2 cda. TAHINA
6 ACEITE DE OLIVA + PARA DECORAR
COMINO
PIMENTÓN
PEREJIL
1.- Si optamos por la opción de cocer los garbanzos en casa, siempre podemos utilizar los ya cocidos que se comercializan en bote, debemos de dejarlos a remojo no menos de 12 horas antes de cocerlos para rehidratarlos.
Cocemos los garbanzos en una cazuela, añadiéndolos cuando el agua esté hirviendo. Los dejamos que se cocinen con sal durante más o menos 1 horas, hasta que esté tiernos. Aunque obviamente no es necesario, yo he retirado la piel de los garbanzos una vez cocidos para hacer un puré más fino y digestivo.
2.- Cuando los garbanzos estén listos, si optamos por cocerlos en casa, o escurriendo los que usemos de bote, ponemos los garbanzos en un bol. Añadimos el aceite de oliva, el ajo troceado, sal, la crema de tahini y el zumo de un limón grande.
Pasamos los ingredientes por la batidora hasta que nos quede una crema. Si vemos que está demasiado espesa podemos añadir una o dos cucharadas del agua de cocción de los garbanzos o un poco más de aceite de oliva.
3.- Para el resto de los ingredientes tenemos varias opciones. Podemos incluir una pizca de comino y pimentón dulce en la mezcla o utilizarlo para espolvorear el hummus. Yo he optado por extender la crema en un plato, dejando un pequeño hueco en el centro, espolvorear comino, pimentón y perejil. Terminamos el plato regando el hummus con un chorrito de aceite de oliva.
Fuente: este post proviene de Galletas para Matilde, donde puedes consultar el contenido original.
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