La receta base la tomé de Dimensión vegana (click para ver la receta original escrita y en video), página de la que ya he hablado en otras ocasiones y que para muchos de nosotros es conocida como "la biblia vegana" por sus increíbles platos. Sin embargo, la he modificado a mi gusto y añadí pasas y almendras para darle el sabor dulce característico de la morcilla canaria.
Recuerdo que de pequeña, la morcilla era de mis platos favoritos. Simplemente me encantaba! Y siempre se servía en comidas familiares, barbacoas y asaderos. Hasta que un día alguien de repente "soltó la bomba" y me desveló de lo que se componía realmente: "es sangre de cerdo envuelta en tripas" :O Incrédula, decidí buscar información y lo único que leía era "sangre", "cerdo", "matanza", "manteca", "tripas"... Me resultó demasiado chocante y decidí no volver a consumir algo así, incluso en esa época en la que no era vegetariana ni sabía que se podía llevar este estilo de vida.
Hoy recupero este plato que recuerdo con cierto cariño, cambiando ingredientes por otros menos violentos. Hemos sustituido la sangre, las tripas y la manteca de cerdo por alubias negras, arroz, gluten, pan rallado y especias. Sin duda mucho mejor, tanto para los cerdos como para nosotros! :D
Espero que les guste!
Ingredientes para 6-8 morcillas:
Un vaso de judías negras (peso en seco).
Una taza de arroz redondo.
Un vaso de gluten de trigo.
Medio vaso de pan rallado.
Dos o tres cebollas.
Un puñado de almendras crudas.
Un puñado de pasas.
Sal.
Pimienta negra.
Una cucharada de pimentón.
Ajo en polvo.
Una cucharada de azúcar.
Papel film.
Aceite para freír.
Dificultad: media.
Tiempo aproximado: hora y media.
Elaboración:
Cocemos las alubias hasta que estén blandas.
Cocemos el arroz, preferiblemente que quede un poco pasado.
Picamos las cebollas y las pochamos en una sartén con aceite hasta que doren.
Cuando estén blandas, trituramos las alubias con parte del agua de cocción.
Las ponemos en un bol amplio donde habremos mezclado el gluten con el pan rallado, y vamos añadiendo todos los ingredientes: la cebolla, el arroz, los frutos secos picados (es una lata el picarlos si no los has comprado directamente así, pero merece la pena) y las especias.
Amasamos y removemos todo bien, es posible que necesitemos poner un poco de agua si nos queda seca o un poco más de pan rallado si queda húmeda la masa.
Ahora simplemente tomamos porciones de masa, a las que damos forma de morcilla y las envolvemos con trozos de papel film, enrollando los extremos como si se tratase de un caramelo. Hacemos unos agujeritos en el film con un palillo o tenedor.
Ponemos a hervir nuestra morcilla en un caldero con agua durante media hora.
Una vez pasado ese tiempo, está lista para consumir como quedamos: frita, asada, a la barbacoa, en potajes, para hacer croquetas, etc. Queda genial en montaditos combinada con tofu ahumado, dulce de membrillo, mermelada, con salsas...