No es extraño, por tanto, que sea la fruta nacional de la India; este país produce dos tercios de los mangos del mundo y en su cultura se asocia a mil y una leyendas. Entre ellas, la que lo relaciona con Buda, a quien se representa casi siempre a la sombra de un mango de lozanía perpetua; se cuenta que Buda alcanzó la iluminación bajo uno de estos árboles, que desde entonces se conocen como "árboles de la sabiduría".
El mango tiene un sabor difícil de describir, un poquito agridulce, y su uso en la cocina es muy variado, ya que nos puede servir tanto para recetas dulces como saladas {recordemos aquel sabrosísimo chutney de mango que preparé hace tiempo ya}.
Hoy, os traigo una receta dulce, pero ligera al mismo tiempo, los postres con fruta son mucho menos pesados y resultan un buen colofón para una comida copiosa. Para elaborar las mousses yo utilicé una pieza de mango fresco y bien maduro {esto es importante, para evitar ese sabor ligeramente resinoso que tienen los mangos que aún están algo verdes}. Pero si no tenéis mango a mano, en muchos supermercados se pueden encontrar también en la sección de congelados, ya sea en trocitos o en puré, que para esta receta también nos va a venir de perlas. Si utilizáis mango fresco, recordad triturarlo muy bien e incluso colarlo para evitar que aparezca alguna hebrita del mango.
Mousse de mango y yogur
Ingredientes para 4-5 personas
Para la mousse:
125 ml de nata (crema de leche) líquida para montar {35% materia grasa}.
175 g de puré de mango.
125 g de yogur natural sin azúcar.
50 g de azúcar.
1 clara de huevo.
5 hojas de gelatina.
Para el coulis de mango:
120 g de puré de mango.
30 g de azúcar.
el zumo de 1/2 limón.
2 hojas de gelatina.
Preparación:
1. Para preparar la mousse, colocamos las 5 hojas de gelatina en agua fría para que se hidraten. Dividimos el puré de mango en dos partes. Calentamos una de estas partes, disolvemos en el mango el azúcar y le añadimos las gelatinas ya hidratadas y bien escurridas. Removemos bien hasta que la gelatina se disuelva por completo y no queden grumos. Mezclamos esta preparación con el resto del puré de mango que habíamos reservado.
2. Agregamos entonces el yogur, mezclando hasta que se integre.
3. En un bol montamos la clara de huevo con unas varillas hasta conseguir un merengue firme. Cuando esté listo, lo mezclamos suavemente con el puré de mango y yogur.
4. A continuación montamos la nata (crema de leche), no es necesario que esté demasiado firme, semimontada. La incorporamos también a la mezcla anterior, poco a poco y con movimientos envolventes para que no pierda aire.
5. Repartimos la mousse en los vasitos individuales y reservamos en la nevera mientras preparamos el coulis de mango para poner por encima.
6. Para preparar el coulis de mango, de nuevo ponemos las hojas de gelatina en agua fría para que se hidraten. Calentamos el puré de mango con el azúcar hasta que se disuelva. Añadimos también el zumo de limón.
7. Escurrimos bien las hojas de gelatina y se las incorporamos al puré de mango. Removemos bien para que no queden grumos. Dejamos templar.
8. Cuando ya no esté caliente, repartimos el coulis de mango sobre las mousses que teníamos reservamos y volvemos a poner en la nevera, un par de horas por lo menos, para que la mousse tome suficiente cuerpo.