Los fines de semana, es el momento de hacer la visita al mercado, pasar entre los productos que acaban de ser pescados y elegir los productos que nos ayudarán a realizar una paella buenísima.
Los ingredientes acostumbran a ser fijos, donde hay variación puede ser en el pescado para hacer el caldo ya que puede variar de unos días a otros, pero siempre de primera calidad y con un gusto buenísimo.
Ingredientes:
Para el caldo de pescado:
3/4 de kg. de pescado de roca, (cabezas de rape, arañas, etc) está vez Nuria nuestra proveedora de exquisiteces de pescado, nos añadió un buen puñado de pequeñas cigalas que a buen seguro, le dió un plus de sabor al caldo.
El jugo de abrir unos mejillones al vapor.
2 cucharadas de aceite de oliva
1/2 cebolla rallada
2 tomates maduros rallados
Aprox. un litro y medio de agua.
Sal
Para el arroz:
1 sepia con salsa interna.
250 grs. de costilla de cerdo cortada en pequeños trozos.
6 gambas (2 por cabeza)
1/2 cebolla picada menuda
1 taza de arroz por comensal
Aceite y sal.
Empezamos preparando el caldo de pescado.
En una olla, colocamos el aceite, la cebolla rallada y mientras se va dorando, vamos preparando el tomate. Lo añadimos y cuando empieza a tener todo un color acaramelado, añadimos el pescado, le damos un par de vueltas y añadimos el agua. En aprox. 20 minutos lo tenemos listo. Importante reservarlo al calor, ya que deberemos utilizarlo caliente para añadir después.
En la paellera, ponemos el aceite y añadimos la cebolla picadita, la vamos dorando, y en este punto colocamos encima las gambas para darles una vuelta y reservarlas para el final.
A continuación añadimos la costilla cortada en trozos pequeños, la doramos y añadimos la sepia cortada también en trocitos. Muy importante, al limpiarla,hay que reservar la bolsa de salsa (color marrón) para añadirla en este punto cortada al sofrito. Como me dijo una gran cocinera ampurdanesa, es lo que le da el toque de sabor a mar.
Cuando todo esta sofrito, añadimos el arroz y le damos unas vueltas para que coja bien el gusto de todo lo que hemos puesto en la paellera. En este punto, añadimos el caldo de pescado caliente, y vamos vigilando la cocción hasta que llega al punto. Unos minutos antes, colocamos las gambas que con el calor, se acaban de hacer sin recocerse.
En nuestra familia, no gusta un arroz con muchos tropezones, por lo que los mejillones y almejas acostumbramos a tomarlos como aperitivo mientras se acaba de hacer la paella.
Como veis no es muy trabajosa y os aseguro que el gusto es increíble.