Estos días de tantas comilonas hay que intentar hacer platos ricos, fáciles, rápidos de hacer e intentar que se puedan dejar hechos antes para que todo el mundo pueda sentarse en la mesa.
Es el caso de estos vasitos que se comen fríos y quedan además de ricos, muy bonitos.
Podéis hacer vosotros mismos la mermelada de tomate, pero si queréis ahorrar tiempo os recomiendo utilizar una ya hecha, como la que yo he utilizado de "La vieja fábrica" que tiene unas mermeladas espectaculares.
He utilizado agar-agar que es una especie de gelatina vegetal en polvo, pero también podéis utilizar otros tipos de gelTina.
Ingredientes:
- 200 ml de nata (crema de leche) líquida para cocinar
- 200 ml de leche entera
- 300 grs de queso parmesano
- 1 bote de mermelada de tomate
- 1 sobre de agar-agar (gelificante vegetal)
- Perejil picado
- Sal y pimienta
Preparación:
Rayar el queso parmesano (fino) y reservar 100 grs para después.
En una cazuela poner la leche, la nata (crema de leche), los 200 grs de queso parmesano y el sobré de agar-agar. Remover continuamente durante 3-4 minutos sin que llegue a hervir. Salpimentar.
Poner en cada vasito una cucharada de mermelada de tomate y echar encima la mezcla de la cazuela y dejar que enfríe por lo menos 3 horas.
Mientras poner el horno a 180-200 grados y en la bandeja del horno colocar un papel especial para que no se pegue y poner montoncitos planos ( que queden finos)del queso rayado que hemos reservado y meter al horno durante 8-10 minutos o hasta ver que estén dorados.
Una vez fríos los vasos y los crujientes de parmesano, echar encima de cada vaso una pizca de perejil picado o cebollino y clavar un crujiente de parmesano encima y listos para comer!!
Fuente: este post proviene de Blog de monikagber, donde puedes consultar el contenido original.
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