La pasta es el plato con el que inician su comida la mayoría de los italianos. Es un alimento energético, rico en hidratos de carbono y proteínas, que se complementan con la grasa de los condimentos para que resulte un alimento muy completo. La gran variedad de tipos de pasta y la multiplicidad de condimentos con los que puede asociarse, ofrecen un gran campo a la imaginación del cocinero, circunstancia que hacen de la pasta un alimento muy interesante.
Este plato es un clásico de pasta cocinado a la napolitana.
Ingredientes:
300 gr de macarrones
150 gr de mozzarella
un bote de tomate triturado
una cucharada de mantequilla
2 calabacines
una cebolla
un diente de ajo
un ramito de hiervas aromáticas (orégano, tomillo y perejil)
una hoja de laurel
50 gr de harina
150 mililitros de aceite de oliva
una cucharadita de sal
Preparación:
Ponemos en una cazuela con un chorro de aceite el tomate, la cebolla pelada y picada, el diente de ajo, la hoja de laurel y el ramito de hiervas aromáticas. Cocemos a fuego suave, entre 25 a 30 minutos. Cuando la salsa esté muy concentrada, retiramos las hiervas, el laurel y el ajo, sazonamos y reservamos.
Cortamos los calabacines en rodajas, sazonamos, pasamos por harina y freímos en abundante aceite. Los ponemos sobre papel de cocina para que suelten el exceso de aceite y reservamos.
Hervimos la pasta en abundante agua con sal. Cuando esté cocida, la escurrimos y la ponemos en un bol, añadimos la mantequilla y mezclamos con la pasta.
Precalentamos el horno a 170 grados.
En una fuente de horno redonda, ponemos capas alternadas de pasta, calabacín, discos de mozzarella y salsa de tomate, finalizamos con una capa de queso.
Cocemos a horno medio durante 15 minutos. Si transcurrido este tiempo vemos que la superficie no está dorada, gratinamos unos minutos.
Fuente: este post proviene de La cocina de Catina, donde puedes consultar el contenido original.
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