Cuando me puse a investigar cómo se hacía este magnífico postre, me encontré diversidad de recetas pero básicamente dos formas de hacerlas, con y sin nata (crema de leche). De hecho es muy común que se les llame en lugar de "pastel de belem", "pastel de nata (crema de leche)".
Yo opté por, sin nata (crema de leche) y la verdad es que es muy, muy parecido al que comí en Portugal. La receta original no lleva nata (crema de leche) pero su evolución la ha llevado a que en algunos sitios de Portugal, sí lleve nata (crema de leche).
En fín, un lio, jajajajaja.
INGREDIENTES:
1 L. de leche entera
500 gr. de azúcar blanquilla
100 gr. de harina de trigo
12 yemas de huevo
600 gr. de masa de hojaldre o 2 planchas rectangulares de 300 gr. cada una
la piel de medio limón
1 palo de canela
mantequilla para los moldes o spray desmoldable
moldes metálicos, pequeños y bajosELABORACIÓN:
Se comienza con la masa de hojaldre porque se necesita que repose un tiempo dentro de los moldes antes de añadir el relleno.
Enrollamos la lámina haciendo un rulo y cortamos porciones de unos 3 cm. Untamos de mantequilla los moldes y colocamos un cilindro en el centro de casa uno.
Poco a poco vamos adaptando la masa para que coja la forma del molde, del centro hacia fuera.
Ahora con la crema del relleno.
Separamos unos 200 ml. de leche en una taza, añadimos la harina y batimos bien con un tenedor, para que se vaya diluyendo. No deben quedar grumos así que incluso podemos darle un golpe de batidora.
Reservamos.
En un cazo calentamos la leche junto con la piel de limón y el palo de canela y dejamos infusionar a fuego lento.
Cuando comience a hervir la leche, añadimos poco a poco la mezcla de harina y leche sin parar de remover. Cuando vuelva a hervir, retiramos la piel de limón y el palo de canela.
Añadimos ahora el azúcar, de nuevo poco a poco, al mismo tiempo que removemos continuamente. Cuando obtengamos una masa bien homogénea, apagamos el fuego y dejamos que repose 10 minutos. Durante ese tiempo espesará un poco.
Separamos las claras de las yemas de una docena de huevos.
Batimos ligeramente las yemas y las incorporamos pasándolas por un colador al resto de ingredientes. Mezclamos bien hasta obtener una crema lisa y homogénea, de un color huevo intenso. La textura será de una crema pastelera semilíquida.
Precalentamos el horno a 220º. Colocamos los moldes en la bandeja delhorno, pasamos la crema a una jarra y vamos rellenando las tartaletas sin llegar al borde de la masa, ya que subirá.
Dejamos en el horno unos 15-20 minutos.
No os preocupeis si lo veis subir, que no se derrama, porque luego volverá a bajar.
Se pueden comer tanto frios como calientes.
Esporvorear con azúcar y canela.
Delicioso.
Espero que si lo haceis me conteis cuánto habéis disfrutado.
Besitos.