Las patatas, se preparen como se preparen, son la guarnición perfecta. Las patatas son un acierto seguro. Y es que hay pocos acompañamientos, para pescados y carnes, que resulten tan estupendos como unas sabrosas patatas.
Son innumerables las recetas de las patatas como guarnición. Se pueden cocinar de mil formas pero el clásico puré es una de las formas más conocidas de elaboración.
Puedes comprar un puré “decente” en el supermercado pero es tan rápida y sencilla su preparación que merece la pena elaborarlo en casa y, además, el clásico puré es muchísimo más sabroso hecho en casa que si lo compramos en el supermercado.
Ahí va la receta:
Ingredientes:
Patatas
Aceite de Oliva (u opcionalmente mantequilla)
Sal y pimienta
Leche (opcional)
Elaboración:
Pelad las patatas y cortadlas en trozos como en la fotografía. Cocedlas en agua hirviendo con sal y unas cucharadas de aceite de oliva virgen. Cuando estén cocidas, pasadlas a un bol con un poco del agua de la cocción y aplastar las patatas con tenedor. Ir añadiendo agua (o leche) según lo necesite (tiene que quedar espeso), rectificad de sal y pimienta.
Opcionalmente, podéis cocer las patatas en agua hirviendo con sal y una cucharada de mantequilla. Una vez cocidas, aplastad las patatas con el tenedor, añadid mantequilla que habréis sacado de la nevera anteriormente, rectificad de sal, espolvoread con pimienta y mezclad enérgicamente.
‘Ya tenéis un delicioso puré de patatas casero!