El verano y los helados son la combinación perfecta. Y si los helados son caseros mucho mejor ¿a qué si? En esta ocasión hemos preparado un helado de galletas de canela hecho con las mismas galletas que puedes encontrar en nuestra tienda online. El sabor es espectacular y la textura es suave y cremosa. Si lo combinas con algún crujiente, ya sea galletas o frutos secos queda alucinante.
Ingredientes helado de galletas de canela
150 gramos de galletas de canela
200 gramos nata (crema de leche) 35% materia grasa (nata (crema de leche) para montar)
300 gramos leche entera a poder ser.
75 gramos de azúcar
2 yemas de huevo
20 gramos de miel
Opcional:
Avellanas troceadas al gusto
Canela para espolvorear
Cómo hacer helado de galletas de canela paso a paso
En primer lugar , en un cazo ponemos a calentar a fuego bajo la nata (crema de leche), el azúcar y la miel hasta que se disuelva todo perfectamente.
Por otro lado trituramos las galletas con la ayuda de una procesadora y las mezclamos con la mitad de la leche.
La otro mitad de la leche la usaremos para mezclarla con la yema de los huevos.
Vertemos la mezcla de galletas trituradas y leche al cazo con la nata (crema de leche), azúcar y miel. Removemos sin parar hasta conseguir una mezcla homogénea.
Por último añadimos la leche con las yemas de los huevos. A partir de este momento y sin parar de remover a fuego medio coceremos hasta que la mezcla espese. Con mucho cuidado de que no se pegue ni llegue a hervir. Este paso es importante porque es cuando se gelatinaza la molécula de la proteína que nos ayudará a conseguir una textura cremosa.
Ahora toca pasar la mezclar a una táper de vidrio o de acero inoxidable y meterlo al congelador tapado. Deja que se temple un poco antes. Es muy importante cremar el helado. Para ello, cada 45 minutos aprox removeremos la mezcla. Así no se formaran cristales de hielo. Podemos llegar a repetir este proceso unas 3 o 4 veces. Guardamos en un túper el helado un par de horas más para que tenga la consistencia deseada.
Trucos para hacer un helado cremoso.
Una de las características más importantes a la hora de conseguir un buen helado es alcanzar el punto óptimo de cremosidad. Cuando introducimos nuestra mezcla al congelador se empiezan a formar cristales de agua y lo que tenemos que conseguir es reducir el tamaño de esos cristales que se forman automáticamente para que nuestro paladar no los perciba y quede un helado suave y con consistencia. ¿Cómo se consigue?Introduciendo aire en la mezcla. Es decir batiendo enérgicamente los ingredientes.
Usando azúcar y otro tipo de edulcorantes. El agua con azúcar disuelta no se congela a 0 ºC, sino a menos. Cuanto más bajo el punto de congelación, mayor número de cristales y de menor tamaño.
Proteínas. Las proteínas tienen dos efectos:
Reducen el crecimiento de los cristales de hielo.
Al calentarlas forman una especie de gelatina, atrapando el agua dentro de una red de moléculas de proteína, por lo que queda menos agua para que los cristales de hielo crezcan. .
Las grasas permiten que los cristales de hielo escurran unos sobre otros y den sensación de untuosidad.
Removiendo nuestra mezclada cada cierto tiempo una vez introducida en el congelador, así evitamos que se formen cristales de hielo de gran tamaño
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