Como sabéis, hace bien poquito hablábamos del guisante en nuestra sección de verduras, donde os contábamos sus cualidades, secretos y beneficios. Como también es una legumbre de temporada, aprovechamos para preparar alguna receta con él. Hoy os contamos cómo preparar una rica Tortilla de guisantes y cebolla.
Ingredientes (2 personas).
- 400 g de guisantes frescos
- 1 cebolla
- 4 ó 5 huevos
- Un poquito de jamón (opcional)
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
Elaboración.
La elaboración no tiene ningún truco especial o diferente de cómo solemos preparar cualquier otra tortilla, pero a continuación os contamos los pasos.
Obviamente, en primer lugar tendremos que desgranar los guisantes.
Luego, nos pondremos con la cebolla, la pelamos y la cortamos en tiras finas.
Ponemos una sartén con aceite de oliva al fuego, y cuando el aceite esté caliente ponemos la cebolla para pocharla. Para que quede bien el fuego tiene que ser medio-bajo.
Mientras tanto podemos aprovechar para ir batiendo los huevos. Ya sabéis, cogemos un bol lo suficientemente grande y los batimos bien, con la varilla de batir o con lo que nos sintamos más cómodos.
Transcurridos unos minutos y cuando la cebolla ya esté más blandita, será el momento de añadir los guisantes. Subimos un poco el fuego y los dejaremos según nos gusten. Nosotros los preferimos más "al dente", ya que luego el contraste en la tortilla será sorprendente.
Llegados a este punto, tenemos un paso opcional. Nosotros hemos añadido también unos taquitos de jamón de bellota, antes de que los guisantes terminaran de cocinarse. Esto hará que la tortilla sea aún más sabrosa.
Cuando ya esté todo en el punto de cocinado que nos gusta, lo mezclaremos con los huevos batidos en el bol.
Volvemos a poner un poco de aceite en la sartén, esperamos a que ambos estén calientes otra vez y echamos toda la mezcla.
Preparamos un plato llano o una tapadera para darle la vuelta mientras se va haciendo la tortilla. Estamos atentos para que no se nos haga demasiado o se queme y con ayuda del plato o tapadera le damos la vuelta. La ponemos de nuevo en la sartén y esperamos a que coja el punto deseado.
Una vez que lo tengamos, la apartamos del fuego y preparamos el plato para servirla.
La colocamos y ¡listo! ¡A la mesa a disfrutar de esta espectacular tortilla de guisantes y cebolla!
Como veis, este plato no tiene ninguna dificultad, a mí en particular me gusta mucho y me recuerda mucho a mi infancia, ya que mi madre solía cocinarla a menudo : ).
Podéis comentar qué os parece esta receta y cómo soléis comer vosotros los guisantes.