El risotto de hoy es perfecto para esta época del año, ya que estamos en plena temporada de setas, aunque yo he usado boletus deshidratados que tienen un sabor mas intenso y que ademas compre en nuestro ultimo viaje a Roma. Los boletus tienen un sabor muy intenso y casan perfectamente con el arroz caldoso que os traigo hoy. Es una receta que requiere su tiempo ya que hay que mover el arroz constantemente y añadirle el caldo poco a poco pero la verdad es que merece la pena.
He usado el mimo agua en que había puesto a remojo las setas 2 horas antes de comenzar la receta y caldo de pollo suave… no hay una cantidad exacta de caldo, ya que se lo vamos añadiendo poco a poco, pero para 400 gr de arroz arborio he usado mas o menos litro y medio de caldo que siempre hay que mantener caliente.
Si preferís usar setas frescas, tener en cuenta que hay que usar el doble o tiple de cantidad ya que el sabor es mucho mas suave y ademas no tendremos el caldo del remojo!!!
INGREDIENTES (4 personas)
350 gr arroz arborio
50 gr boletus deshidratado
40 gr de mantequilla
60 gr de parmesano
1 cebolla blanca
1,5 l de caldo de pollo suave
4 lonchas de jamón ibérico
Ponemos a remojo las setas unas 2 horas a remojo en agua caliente.
Colamos el agua del remojo y le añadimos el caldo de pollo, lo ponemos a hervir a fuego suave para mantenerlo caliente. Troceamos los boletus.
Pelamos la cebolla y la picamos finamente.
Salteamos la cebolla a fuego medio hasta que se ponga transparente, es importante que no se dore, para que el sabor no sea dominante.
Añadimos el arroz y lo salteamos durante 5 minutos o hasta que el arroz se ponga un poco trasparente.
Añadimos los boletus y poco a poco el caldo, cazo a cazo… removiendo constantemente.
Seguimos con el proceso de añadir el caldo unos 16-18 minutos, no es exacto así que mejor probar el arroz, es importante que no quede demasiado blando.
El una bandeja de horno ponemos papel de horno y 4 lonchas de jamón ibérico, las cubrimos con otro papel y las horneamos en el horno previamente precalentado a 200º hasta que estén crujientes y doradas.
Una vez retirado del fuego se añade la mantequilla y el queso parmesano recien reyado, removemos bien y servimos inmediatamente, junto con el crujiente de jamón.
Espero que os guste! la semana que viene os enseño una receta perfecta para aprovechar las sobras del risotto!
Feliz semana a todos!
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