hace unos días me apeteció probar los rollitos de canela que tantas veces he visto publicados en varias paginas de la blogosfera, empezando con Objetivo: Cupcake Perfecto de Alma y continuando con el blog de Maria Lunarillos. Entre tanto me acordé de la receta de masa que empleaba mi madre para hacer masas levadas, muy, muy fácil, en la que si no añadimos azúcar podemos emplear perfectamente para hacer una base de pizza por ejemplo, y decidí hacerla.
El resultado me encanta, por el sabor y por el hecho de que siempre sale bien, parece que por fin he dado con la receta de masa levada que nunca da problemas, que nunca se queda pegada a las manos y que de verdad, es un placer trabajarla. Y tanto que hasta la fecha llegué a repetir tres veces antes de publicar la entrada, de hecho hice fotos de dos de las tandas de rollitos.
Ingredientes para la masa levada:
500 gr. harina de todo uso
1 taza con leche
1/2 taza con aceite de girasol o de oliva suave - para las recetas saladas prefiero el aceite de oliva y el de girasol para las recetas dulces
1 huevo talla L
2 cucharadas soperas de azúcar - tbsp.
1 pizca de sal
1 sobre de levadura seca de panadero de Lidl
Ingredientes para el relleno:
120 gr. mantequilla sin sal
120 gr. azúcar moreno
1 y 1/2 cucharaditas de pasta de canela - tsp.
120 gr. nueces picadas ( se pueden emplear los frutos secos que os gustan, o no)
Ingredientes para el glaseado:
150 gr. azúcar glass
2 - 3 cucharadas de leche o nata (crema de leche)
Preparación de los rollitos de canela con nueces:
Tamizamos en un bol la harina, añadimos uno por uno todos los ingredientes, empezando con los secos.
Mezclamos con la mano (limpia) los ingredientes hasta integrar y continuamos hasta obtener una masa elástica, que se despega de las paredes del bol.
Dejamos levar la masa en el mismo bol, a una temperatura de por lo menos 20º C hasta que doble el volumen.
Volvemos a amasar en el bol para obtener una masa elastica y la volcamos encima de una superficie enharinada, para extender.
Extendemos con la ayuda de un rodillo, formando un rectángulo.
Cubrimos la superficie del rectángulo con el relleno de canela y frutos secos.
Enrollamos por el lado más largo y pegamos el extremo exterior del rollo pincelando con leche.
Cortamos trozos de rollitos con un grosor de 2 cm. y los colocamos en una bandeja de horno engrasada con mantequilla o cubierta con un mantel de silicona.
Dejamos una vez más a levar los rollitos mientras ponemos el horno a calentar a 190ºC, calor arriba y abajo, sin ventilador.
Horneamos durante 20 - 25 minutos en la posición central del horno, los sacamos cuando tienen un color dorado oscuro (no marrón).
Cubrimos los rollitos con glaseado y los dejamos que se templen antes de servir.
Preparación del relleno:
Ponemos la mantequilla y la canela en un bol y los fundimos en microondas, un minuto a media potencia.
Removemos con una espátula de silicona hasta que se vayan mezclando y los dejamos templar.
Añadimos el azúcar moreno y los frutos secos picados, integrando uno por uno los ingredientes.
Reservamos el relleno hasta la hora de emplear.
Preparación del glaseado:
Mezclamos el azúcar glass con la leche o nata (crema de leche) hasta obtener una salsa espesa.
Reservamos y echamos el glaseado por encima de los rollitos de canela justo después de sacarlos del horno.
Hemos desayunado, almorzado y merendado rollitos varios días y me parece que pronto vamos a repetir, pues el único peligro que tienen es que son adictivos... Os invito a probar y decirme si tengo razón.
Buen provecho y hasta pronto :)
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Besos???
Fuente: este post proviene de No solo cupcakes... con Mara, donde puedes consultar el contenido original.
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