Pues así como quien no quiere la cosa ya volvemos a tener aquí el fin de semana!
He de confesaros que desde que tenemos a Noa en casa nosotros no sabemos exactamente en que día vivimos... si es martes o sábado... estamos a lo que ella mande!! jejeje
Pero bueno, vamos a intentar sacar un ratillo el fin de semana para preparar algo rico y con lo que nos pirra la comida asiática, porque no, la prepararemos en casita!
Desde siempre, cuando hemos ido a comer a restaurantes asiáticos, a Fran le han encantado los rollitos de primavera, y siempre, siempre, el entrante obligado son unos rollitos. Y hacedme caso, aunque parezcan complicados de preparar no lo son!! Con un poquito de trabajo en casa los podéis hacer riquísimos!!
Ingredientes:
(para 10-12 rollitos)
- 100 gr. de carne picada de cerdo
- 75 gr. de puerro
- 50 gr. de zanahoria
- 100 gr. de repollo
- 12 láminas para rollitos
- 4 cucharadas de salsa de soja
- 2 cucharadas de glutamato sódico
- 1 huevo
- aceite de girasol
Preparación:
Cortamos la verdura (zanahoria, puerro y repollo) en juliana y la ponemos en una olla a hervir. No hay que cocinarlo mucho rato, sólo darle un hervor.
Cuando haya llegado el agua a ebullición, retiramos del fuego, colamos bien el agua y colocamos la verdura en un bol.
Por otro lado, salteamos en una sartén la carne picada con un chorrito de aceite hasta que esté doradita. No hace falta añadirle sal ya que luego condimentaremos con salsa de soja y ya es bastante salada.
Cuando la carne esté hecha, añadimos la verdura que teníamos reservadas, removemos bien para que se mezclen todo y doramos todo junto un par de minutos.
Finalmente, añadimos las cucharadas de salsa de soja y de glutamato sódico. Esta mezcla será el relleno de los rollitos.
Vamos a por las láminas de rollito. Seguir las instrucciones del fabricante. Si las compráis secas (las de arroz) hay que humedecerlas para que sean manejables y se peguen. Si las compráis congeladas únicamente hay que sacarlas del congelador un rato antes y ya están listas para usar.
Añadimos en el centro de cada lámina un par de cucharadas soperas de relleno, doblamos las puntas hacia adentro y enrollamos formando un paquetito. Batimos un huevo y pincelamos los bordes para sellar el rollito y que no se nos abra.
Cuando los tengamos todos preparados, freír en abundante aceite de girasol caliente. Con un minutillo por cada lado será suficiente para que os quede crujiente. Retirar y dejar escurrir el exceso de aceite sobre papel absorbente.
Servir acompañados de salsa de soja o agridulce.
Feliz fin de semana!!