Esta es tan solo una variante del excelso salmorejo cordobés que publiqué en el blog con la receta genuina de la cordobesa Lola Lucena (pincha aquí para ir a la receta)
Tenía una cena especial con amigos y quería "tunear" o variar la tradicional crema fría dándole un toque más sofisticado.
El resultado es buenísimo. Al tradicional sabor del salmorejo le añadimos la acidez y textura de la fresa que le combina muy bien.
Recordad que yo NO le pongo nunca vinagre al salmorejo, así que, al añadir un poco de fresón le aportamos el puntito más ácido de la fruta roja.
Probad un día a ver qué os parece y me decís cómo ha ido el experimento, ¿vale?
Para 8 personas:
1,5 Kg de tomates maduros
media barra de pan del día (preferiblemente)
250 g de fresón
1 diente de ajo
un vaso de aceite de oliva virgen extra (250 mL)
sal
mozzarella en bolitas
cebollino frescoSe pone el pan cortado en trozos con los dedos en un bol grande o ensaladera junto con los tomates lavados y cortados en trozos. Se añade el diente de ajo picado y sal. Se deja macerar una hora aproximadamente:
Se lavan y cortan los fresones (dejando unos cuantos frutos para la decoración final) y se añaden al macerado de tomates.
En el vaso batidor americano (si no lo tenéis podéis usar batidora eléctrica tipo Minipimer o similar) se pone el majado y se bate enérgicamente un minuto. Podéis añadir un poco de agua fría si los tomates no son muy maduros y queda muy espeso.
Se va añadiendo poco a poco y moviendo sin parar el aceite de oliva, hasta que veáis que va emulsionando la crema y va cambiando el color de más rojo a anaranjado. También se va notando en la textura más cremosa, tipo mayonesa:
Se rectifica de sal o se añade más aceite si lo notáis muy líquido.
Se pone a enfriar en la nevera o refrigerador. Para servir se pone una mozarella mini con una fresa cortadita en láminas, un poco de jamón ibérico y cebollino espolvoreado.
También podéis decorar al modo tradicional con huevo duro picado y picada de jamón serrano.
Mil gracias Saly y familia por ser tan adorables!! Ah, y por ese vino blanco tan delicioso que probamos!!