No puede determinarse el momento de la aparición, en la historia del hombre, de ese elemento fundamental en la cocina, que es la olla, aunque es posible que haya nacido con la alfarería en el neolítico, cuando, supongamos, se empezaron a cocinar, tal vez por casualidad, los alimentos y así nacieron, las primitivas sopas y también los guisos. Porque si de algo no hay lugar a dudas es de que ollas y guisos vienen de la mano, desde hace incontables años, aquí y en todas partes del mundo.
En términos generales, un guiso es una comida con una base de fritura y ulterior cocción en agua, pero lo interesante es que cada región de cada país tiene su propio guiso y siempre, indefectiblemente, se trata de una comida de pobres, hecha de modo un poco informal con los ingredientes que se encuentran a mano.
100 % mio.
Ingredientes:
- 2 tazas de cebada hervida.
- 1 cebolla.
- 1 zanahoria.
- Medio pimiento – el que más te guste!
- 1 zapallito verde.
- 1 puerro.
- Media calabaza.
- 1 diente de ajo – opcional.
- 4 Albóndigas de pollo (opcional), para mis las mejores que probé en los últimos tiempo, me las mando Nico Correa Posse de TodoPollo, saludable y en tu casa!
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Preparación:
- Hervir la cebada hasta que este cocida y dejarla en espera.
- Picar las verduras.
- Cocción: Comenzar con el ajo, para impregnar el aceite, luego la cebolla, puerro, pimiento, calabaza y al último el zapallito verde. Sazonar y condimentar (use pimentón, ají molido y orégano)
- En este punto, le hice lugar a las tremendas albóndigas de pollo!, las deje que se doren dándolas vuelta y vuelta.
- Agregar la cebada ya cocida.
- Colocar caldo para finalizar la cocción.
Y Voalá…..plato terminado.
Fuente: este post proviene de Ivi Cossio La Pasión en mis Manos, donde puedes consultar el contenido original.
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