Se trata de una variación de las clásicas salsas pesto verde y rojo (que son dos monumentos icónicos de la gastronomía, así en general) que más allá de su siempre llamativo aspecto, encierra un sabor de lo más peculiar e interesante para jugar y mezclar. Yo he usado nueces, pero podéis dejaros llevar y añadir avellanas, pistachos, almendras o piñones. La albahaca - cuyo aroma es irrepetible - puede modificarse por espinacas y tira de los quesos que más te apetezcan. Crea. Improvisa. Disfruta.
Yo te dejo por aquí mi versión y luego tú ya te lanzas a la aventura. Te doy las cantidades del pesto como para unas 4-5 personas. Lo restante puedes, cómo no, reservarlo para otros platos de pasta o darle vida a unas pechugas de pollo y hacer una variante de esta propuesta mía de hace tiempo Pollo al pesto. Lo de siempre: yo te doy ideas, tú ejecutas.
Sin más rollos vamos a colorear de rosa este día, hitchcookian@s... ¡Mandiles arriba!
Ingredientes
90 g de spaghetti por persona (nosotros usamos integrales)
Agua para cocer
Sal
Albahaca fresca
Parmesano rallado y pimienta negra recién molida Para el pesto de remolacha
200-220 g de remolacha cocida
2-3 cucharadas de tomate concentrado
4-6 cucharadas de aceite de oliva Virgen Extra
10-12 nueces peladas
Queso curado y Parmesano rallado
Albahaca fresca y orégano
Pimienta negra
1 diente de ajo Tiempo: 15 minutos
Elaboración del pesto
Esta receta es bien sencilla, todo lo que necesitaremos tener a mano es una batidora y una olla alta para la pasta.
Echa en vaso batidor la remolacha y tritúrala un poco.
Añade el resto de ingredientes y tritura. El único truco aquí es probar para que des con el sabor y la textura que tú quieras. Debería quedar una pasta densa.
NOTA: Si te va el picante o darle un chispazo a este pesto puedes añadir un poco de guindilla seca (pepperoncino) o unas gotas de Tabasco.
Culminación del plato
Pon a cocer abundante agua SIN SAL y desde luego SIN ACEITE. Añade la pasta que hayas elegido y ahora sí, lanza un buen pellizco de sal. Cuece según las instrucciones pero OJO que quede bien al dente que terminaremos su cocción junto con la salsa.
IMPORTANTE: Guarda como medio vaso de agua de la cocción de la pasta antes de escurrirla.
Cuela la pasta y enseguida viértela dentro de la olla con el fuego moderado. Añade unas 4 cucharadas de la salsa pesto de remolacha y el agua de cocción reservada. Empieza a remover bien la pasta para que absorba el sabor y el color del pesto y el líquido casi se evapore.
Sirve los spaghetti calientes y corona con más queso Parmesano o curado por encima, unas nueces partidas y unas hojas de albahaca cortadas SIEMPRE con las manos.
¡Que aproveche, hitchcookian@s!