Esta tarta es un gran recuerdo del verano, pero cambiando las frutas puede ser un buena opción para el otoño, puedes añadir pera, mandarina, unos higos, almendras etc... deberíamos quedar para hacerla y merendar ahora que los días van a empezar a acortarse, merendar sin excusas porque la vida en la ciudad pospone esos encuentros en casa, hagamos tartas de fruta y chocolate caliente, café y rosquillas, quedemos para merendar porque es el mejor plan que se puede tener.
La masa es muy sencilla, la típica del bizcocho de yogurt de toda la vida, pero esta receta utilizo un yogurt griego, y las frutas las que tengo por casa, pero admite cerezas, manzanas, melocotones, peras,albaricoques..... lo que quieras.
INGREDIENTES:
1 yogurt griego.
3 huevos M.
1 medida de aceite.
2 medidas de azúcar.
3 medidas de harina.
1 sobre de polvos de hornear Royal.
Una pizca de sal.
2 manzanas nuevas, de las que son un poco ácidas.
3 ciruelas rojas.
1 nectarina.
Un puñado de arándanos
Encendemos el horno a unos 180º para que se vaya calentando y empezamos a elaborar la masa del bizcocho. En un bol mezclamos con la batidora los huevos, el yogurt, el azúcar y el aceite. Una vez bien mezclado se añade la harina tamizada con la levadura en polvo y la pizca de sal mezclando sin parar a velocidad media hasta que la masa empiece a hacer alguna burbuja.
Se engrasa y enharina un molde redondo y se vierte la masa encima, lo importante es que no se cubra mas de dos tercios de alto porque si no, lo mas probable es que la masa al hornear se salga por fuera.
Se pelan y cortan en gajos finos las diferentes frutas y se disponen en orden sobre la masa. El orden a tu gusto, a mi me parece bonito hacer una fila con cada fruta, pero puedes ir intercalando los gajos con las diferentes frutas que utilices. Puedes espolvorear un poco de azúcar por encima si te gusta. Hornea unos 30min. o hasta que al pincharla con una aguja esta salga limpia.