Los caramelos de violeta son típicos de Madrid. Para cualquier madrileño es un sabor de su infancia. No para mí que soy del pirineo y allí tenemos otros sabores ;)
En cualquier tienda de souvenirs y pastelerías de la capital los encontrareis. Incluso hay una tienda que vende únicamente estos caramelos.
Tenía en casa una bolsita y también tenía higos. Y de esto que se te enciende la bombilla y pensé que podían ir bien. ¡¡Y me encantó!! Y esto, señoras y señoras no pasa siempre. A veces las geniales ideas que habías tenido no lo son tanto una vez que la llevas a la práctica.
Para un molde de: 20 x 20
Para la masa de almendra:
180gr de harina
- 100 gr de almendra molida
- 70 gr de mantequilla fría
- 60 gr de azúcar blanco
- 50 gr de azúcar moscabado
- ¼ de cucharadita de sal
- 2 yemas de huevo (L)
- 30 gr de creme fraiche.
- 1 clara de huevo para pincelar cuando horneemos.
Mezclamos la harina, la almendra y la sal.
Añadimos la mantequilla cortada en cubos y mezclar a baja velocidad si es con maquina hasta que se integre. Si es a mano pues a vuestro ritmo frotáis con las manos hasta que tenga una textura arenosa.
Incorporamos el azúcar, y las yemas y mezclamos. Por último incorporamos la creme fraiche.
Pasamos la masa a la encimera y amasamos con la palma de la mano deslizándolo hacia delante.
Hacer una bola, envolverla con film y meter en el congelador durante 1 hora o bien en el frigorífico durante toda la noche.
Después de hacer varias tartas con esta masa a mí lo que mejor resultado me da es coger trocitos de la masa y con la mano ir cubriendo el molde dejándola lo mas fina posible apretando bien. Cortamos lo que nos sobra, y con el dedo humedecido en agua lo pasamos por el borde. Metemos al congelador. Un par de horas o hasta que queramos hornearla.
Precalentar el horno a 175ºc. Cubrimos la base de la tarta con un papel de horno y ponemos legumbres para evitar que se hinche. Horneamos durante 20 minutos.
Sacamos del horno, retiramos las legumbres y el papel de horno y pincelamos con clara de huevo. Volvemos a meter al horno durante otros 10 minutos. Lo de pintar con clara de huevo es porque esto hará una película que evitara que la masa se reblandezca por la humedad del relleno.
Dejamos enfriar dentro del molde.
Compota de higos:
- 200 gr de higos maduros
- 35 gr de azúcar moscabado o panela
- 15 gr de miel
- 10 gr de mantequilla
Lavamos los higos, y les cortamos el tallo y cualquier parte mas dura que pueda tener.
Podemos dejarlos sin pelar o si tienen la piel muy basta entonces sí que se la quitamos. Los picamos en daditos.
En un cazo ponemos el azúcar, la miel y la mantequilla. Cuando esté todo fundido añadimos los higos. Cocinamos hasta que tengamos una compota. Dejamos enfriar.
Mousse de caramelos de violeta:
- 400 gr de nata (crema de leche) (35%mg)
- 130 gr de caramelos de violeta
- 50 gr de chocolate blanco
- 1 hoja de gelatina
- 2 gotas de colorante violeta
Ponemos a hidratar la gelatina en agua fría.
Trituramos en un mortero los caramelos.
En un cazo ponemos la nata (crema de leche) y los caramelos de violeta y ponemos a calentar a fuego bajo hasta que se fundan estos últimos.
Cuando saquemos del fuego añadimos el chocolate y la gelatina y removemos hasta su completa disolución. Ahora añadimos también el colorante. Es preferible añadir dos gotas, remover y ver si queremos ese tono y si no agregar más. El colorante está tan concentrado que hay veces que pensamos que hemos echado poco y luego resulta todo lo contrario. Se trata de darle un color violeta sutil.
Dejamos en la nevera hasta el día siguiente.
Con una batidora de varillas montamos la mousse. Tal cual lo dejamos en la nevera solamente tenemos que meterle las varillas. Rellenamos una manga pastelera con la mousse.
Montaje:
- Higos
- 2 hojas de gelatina
Sobre la base de almendra que tenemos extendemos una fina capa de compota de higos. Nos sobrará algo de la que hemos hecho, pero la podemos utilizar sobre alguna tostada.
Terminamos de rellenar el molde con la mousse de caramelos de violeta.
Cortamos los higos en cuartos y con ellos cubrimos toda la tarta.
Fundimos la gelatina previamente hidratada en agua fría. Simplemente la ponemos unos segundos en el microondas y con un pincel mojado en la gelatina vamos pintando los higos para darles brillo.
¡A disfrutar!!!!