Hoy te traigo la receta de uno de mis postres favoritos: la tarta de manzana clásica, la de toda la vida, aprovechando que tenía estas manzanas CrimsonSnow, #laqueselleva: rojas por fueras y blancas por dentro, sabrosas como las manzanas de siempre.
Esta tarta de manzana es parecida a la que hace mi madre pero con unas pequeñas modificaciones para conseguir una masa más crujiente y una crema más sabrosa. La diferencia con las tartas de manzana industriales es enorme en sabor y textura y te aseguro que merece la pena hacerla en casa.
Ingredientes de la masa quebrada para la base de la tarta de manzana clásica:
250 g de harina normal
125 g de mantequilla fría
60 g de agua fría
1 cucharada de azúcar
1/2 cucharadita de sal
Ingredientes para el relleno de crema pastelera:
1/2 l de leche
1 vaina de vainilla o unas gotas de aroma de vainilla
125 g de azúcar
40 g de maizena (almidón de maíz)
2 huevos o 3 yemas
Ingredientes para la cobertura:
2-3 manzanas Crimson Snow
un poco de zumo de limón
Mermelada de albaricoque o almíbar
Elaboración:
Precalienta el horno a 180 ºC
Mezcla todos los ingredientes necesarios para hacer la masa quebrada excepto el agua fría, y amasa bien con una amasadora o con las manos pero intentando calentar la mezcla lo mínimo posible.
Una vez que la masa tenga consistencia de arena mojada, añade el agua y amasa lo mínimo posible hasta que tengamos una masa uniforme.
Envuelve la masa en papel film y déjala reposar en la nevera mientras prepara la crema pastelera.
Calienta la leche con la vaina de vainilla abierta longitudinalmente.
Cuando comience a hervir la leche, reserva el cazo y en un bol mezcla los huevos, maizena y azúcar hasta tener una crema homogénea, y añade poco a poco la leche mientras bates la mezcla con unas varillas para que se integren todos los ingredientes.
Calienta la mezcla a fuego lento hasta que espese y reserva para que se enfríe cubriendo la crema con un trozo de papel film.
Estira la masa quebrada con un rodillo, forra el molde y hornéala unos 10-12 minutos en vacío con un papel de horno y unos garbanzos encima, de forma que se sella la masa y luego al hornearla otra vez con el relleno no se reblandece.
Deja enfriar la masa mientras pelas las manzanas y las cortas en rodajas, dejándolas en un bol con agua y un poco de zumo de limón para que no se ennegrezcan.
Una vez fría la masa, echa por encima la crema pastelera que ya se habrá enfriado y coloca las manzanas escurridas decorando la superficie.
Pincela las manzanas con un poco de mermelada de albaricoque rebajada con agua o con un poco de almíbar que puedes preparar con agua y azúcar.
Hornea la tarta a 200 ºC unos 20-25 minutos hasta que las manzanas comiencen a dorarse
Si has pincelado la tarta con mermelada, nada más sacarla del horno, pincélala otra vez y déjala enfriar.
Consejos y notas:
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