Buenos días, ¿qué tal ha ido la semana?
Yo intentando ajustarme de nuevo a la rutina. Como mi padre estuvo la semana pasada, se fue el lunes pasado por la noche, no he estado comiendo muy bien así que estoy intentando volver a la normalidad con la comida aunque me está costando un poco y mi cara, mejor dicho mi barbilla, lo está notando.
Fue cumplir 28 años, hace ya casi seis meses, y mi barbilla se ha creido que tengo de nuevo 13 así que estoy intentando controlar lo que como aunque de vez en cuando cae algún dulce. Y más si tu hermana cumple 26.
El día que lo celebró en casa con sus amigas yo trabajaba de tarde así que sólo pude sacar fotos de la tarta entera y las otras las sacaron ellas.
La elección de la tarta fue un poco complicada, pero al final creo que fue todo un éxito aunque el agujero era un poco pequeño y por eso creo que no cayeron tanto los caramelos. Sólo había hecho este tipo de tartas una vez y fue en el restaurante donde hice las practicas y encima la tarta era para un cumpleaños fuera de allí así que no vi cómo se cortó y cómo quedó.
Yo hago las tartas con moldes individuales, en este caso cuatro, bastante bajitos, a mi familia no les suelen gustar las tartas con mucho bizcocho y crema, estas altas que están tan de moda. Vosotras si lo preferís podéis usar un único molde y luego cortarlo en diferentes capas. Aunque con lo torcidas que me suelen quedar a mi las tartas con los rellenos no me fío mucho de cómo me quedarían así.
Ha quedado una tarta de lo más suave y no excesivamente dulce, no se nota para nada que es sin gluten. Según mi hermana es la mejor tarta que le he hecho. Ya sabéis que a mi familia no les gusta los dulces demasiado empalagosos, pero si a vosotros os gusta un poco más dulce siempre podéis echar más azúcar al relleno, normalmente se echa la mitad de azúcar que de nata (crema de leche).
Ingredientes bizcocho
280 g de harina sin gluten (Yo usé un preparado de Gallo, pero lo podéis sustituir por 195 g de harina de arroz y 85 g de maizena, fécula de maíz)
200 g de azúcar
125 ml de leche sin lactosa
250 g de margarina
125 g de yogur natural sin lactosa (yo usé de soja sin azucarar porque era el que tenía en casa)
3 huevos
2 yemas
1 y 1/2 cucharadita de levadura
1/2 cucharadita de bicarbonato
Confetti
Corazones de azúcar o gominolas para el centro
Ingredientes relleno
400 ml de nata (crema de leche) para montar sin lactosa (yo usé la de La Asturiana y me sorprendió bastante ya que tiene bastante grasa y cuanto más grasa mejor monta)
100 g de azúcar glas
Precalentamos el horno a 180º.
En un bol batimos la margarina y el azúcar.
Añadimos las yemas y los huevos uno a uno. Hasta que no se haya integrado el anterior a la masa no añadimos el siguiente.
Incorporamos el yogur.
Incorporamos la harina previamente tamizada con la levadura y el bicarbonato intercalada con la leche.
Añadimos un puñado de confetti y mezclamos lo justo para que se repartan en la masa.
Vertemos la masa en nuestro molde o moldes previamente engrasados.
Yo como uso 4 moldes bajitos, simplemente horneé cada bizcocho 10 minutos, todo dependerá del tamaño. Lo mejor es ir controlando y pincharlo con un palillo, cuando este salga limpio significa que nuestro bizcocho ya está.
Dejamos enfriar antes de desmoldar.
Para el relleno simplemente montamos la nata (crema de leche) junto el azúcar glas. Para que la nata (crema de leche) se monte más rápido podéis meter el bol y las varillas en la nevera antes.
Para el montaje de la tarta cogemos los bizcochos del medio, en mi caso dos, dejando la tapa y la base sin tocar, y cortamos el centro con la ayuda de una corta galletas.
Ponemos la base de la tarta sobre un plato y esparcimos una capa de nata (crema de leche). Colocamos la siguiente capa, uno de los bizcochos con el agujero y ponemos una capa de nata (crema de leche). Hacemos lo mismo con la siguiente capa y antes de rellenar el agujero con nuestros caramelos de azúcar o gominolas. Terminamos colocando la tapa, un bizcocho que esté sin agujero y cubrimos la tarta con el resto de nata (crema de leche).
Al llevar nata (crema de leche) la tarta tiene que estar en la nevera hasta el momento que se vaya a consumir, la podéis sacar 15 minutos antes para que no este tan fría.
Feliz semana :)
Fuente: este post proviene de Repostería Tximeleta, donde puedes consultar el contenido original.
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