Creo que esta es la última receta que me queda por subir de las que se hicieron en Navidad en mi casa.
En mi caso no es raro,hay muchas recetas que se quedan por el camino sin ver la luz.
Puede ocurrir que fotografíe pero no escriba la receta por pereza y luego se me olvide de dónde la saqué o cómo la hice.
Puede que después no me parezca tan fantástica.O que no me gusten las fotos o que en ese momento no pueda hacer las fotos o que no me apetezca hacerlas.Incluso que no quiera agobiar publicando tan seguido.
Esta última temporada, sin embargo, estoy sacando una receta más a la semana para dar salida a lo que tengo que merece la pena.No voy, sin embargo, con tanta asiduidad a vuestros blogs.Si os dais cuenta, mis visitas a vuestras cocinas son rondando las once de la noche y hay días, en que a esa hora, una no puede ni con sus pensamientos.
Todos sabemos lo que cuesta tirar de un blog así que yo, de momento, sigo tirando del mío porque me gusta y visitando los vuestros cuando mi tiempo lo permita.Creo que es hora de ir dejando a un lado la obsesión por los comentarios y por estar en todas partes.La calidad de lo que se ve y se cocina es lo que verdaderamente importa.
Ingredientes
Escalopes frescos de foie hasta completar unos 300 gr.
Un botecito de trufa negra en conserva.
Sal
Pimienta
Un chorrito de brandy
Una medida de Pedro Ximénez
Media medida de azúcar
Preparación
Limpiar los tozos de foie rompiéndolos y quitando los restos de venas que puedan tener.
Salpimentar y añadir el brandy y rallar una trufa por encima.
Amasar y meter en un molde válido para horno.
Hornear a 60º unos 40 minutos.
Dejar enfriar en la nevera
Para la reducción de Pedro Xímenex ponemos en un cazo al fuego el vino y el azúcar y reducimos,unos diez minutos.Al enfriar el espesor de la salsa es mayor.
Cuando la terrina esté fría desmoldamos, rallamos un poquito de trufa por encima y salseamos ligeramente con la reducción de PX.
Nos queda una terrina que es igual que un foie micuit.Recomendable cien por cien.