No os mentimos si os decimos que el miércoles a esta hora teníamos preparada una entrada para hoy completamente distinta. La verdad que he de decir que era bastante ingeniosa. Habíamos decidido hacer un tributo a Valentino (sí, sí, el diseñador) porque las cosas como son, esta fiesta no es una de nuestras favoritas. Quizás porque es demasiado comercial. Pero, si lo piensas bien, también Papa Noel lo es y nos encanta. Quizás porque la rubia no es muy amiga del mariconeo. Quizás porque la morena no ha conseguido que su Valentín se vuelva de parranda (creemos que está tomando cañas). No sabemos? Pero todo cambió mientras la madrileña preparaba la receta: Panna Cotta de chocolate negro con gelatina de Ginebra.
Y es que por primera vez, tuvo que repetirla por tres veces. No había manera, no paraban de rompérsele corazones de gelatina en las manos. Y por un momento estuvo a punto de tirar la toalla. Pero no. El postre estaba resultando todo un tributo al amor.
Porque si lo piensas, qué es el amor más que luchar con todas tus fuerzas por lo que quieres. Y sí, se resiste, es complicado, muchas veces sale mal, se rompen corazones (que dejan un sabor a Ginebra en los labios), pero todos recaemos. Nos encanta intentarlo. Una y otra vez. Buscar ese cosquilleo en el estómago. Pensar que nos vamos a poner para impresionarle cuando nos vea. Esa sonrisa cómplice con la que compartimos almohada. Esa canción que nos recuerda ese momento. Reír a carcajadas sin ningún motivo. Y no rendirse nunca.
Si es que como veis en el fondo soy una romántica. Y este año va a ser el año del amor, lo tengo claro. Seguro que apetece mi Valentino. Mientras, le estaré esperando con mi Ginebra en las manos, una sonrisa en los labios y mi vestido rojo. Feliz San Valentín a todos.
Ingredientes?
Para la gelatina de ginebra: 1 sobre de gelatina Royal del vuestro sabor preferido (en este caso hemos utilizado de la de fresa).
400ml. de agua.
100ml. de ginebra.
Para la Panna Cotta: 100ml. de nata (crema de leche).
300ml. de leche entera.
90gr. de chocolate negro (también puede ser con leche o blanco) de buena calidad.
Opcional: pepitas de chocolate de repostería.
Con las manos en la masa?
Comenzamos preparando la gelatina de ginebra. Para ello tenemos que seguir las instrucciones del paquete de gelatina que vayamos a utilizar (en nuestro caso Royal) modificando un poco el último paso. Ponemos a calentar 250ml. de agua, en el momento que rompa a hervir incorporamos el contenido de un sobre. Integramos bien. A continuación, incorporamos 150ml. de agua bien fría y 100ml. de ginebra (si sois un poco más borrachines, podéis poner 100ml. de agua y 150ml. de ginebra).
Echamos en la base de los recipientes que vayamos a utilizar una capa del líquido rojo. Tenemos que dejar que cuaje antes de preparar la Panna Cotta. Necesitaréis aproximadamente 3 horas de nevera.
Nos ponemos manos a la obra con la Panna Cotta. Aunque parezca un paso trivial, es muy importante tratar la gelatina que hayamos comprado de forma adecuada. Tanto si vamos a utilizar láminas como sobres en polvo, os aconsejo que leáis las instrucciones para que os salga bien a la primera (lo digo por experiencia).
A continuación, ponemos en un cazo a hervir la leche y la nata (crema de leche). Retiramos del fuego e incorporamos el chocolate troceado. Removemos bien con unas varillas hasta que se haya disuelto completamente. Añadimos la gelatina (si es en láminas, escurridla bien antes) e integramos.
Montamos el resto del postre. Ponemos una capa de pepitas de chocolate (que sea de buena calidad) sobre la gelatina de ginebra ya cuajada. A continuación, vertemos la Panna Cotta sobre la misma (esperad un poco a que se haya ido el calor, para que no se os deshagan las capas inferiores).
Introducimos en la nevera, durante otras 2-3 horas. El siguiente paso es el mejor, ¡disfrutad como enanos y da igual si es solos o acompañados =)!
Antes de acabar, quiero lanzar un reto público a mi compañero/amigo Julio. Sí, sí, no disimules. La próxima vez que hagas Panna Cotta quiero pruebas de la sencillez en el preparado y por supuesto del perfecto sabor conseguido =)
Fuente: este post proviene de Con Extra de Queso, donde puedes consultar el contenido original.
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