El plátano es una de las frutas que, en lo que se refiere a la repostería, o lo amas o lo odias... ¡Y a mí me encanta!
Y para los que seáis un poco reticentes, tengo que deciros que en esta ocasión el sabor del plátano es muy suave y, en combinación con la galleta, resulta delicioso.
Con estos vasitos he conseguido una receta que es todo ventajas: es fácil, rápida, rica, e ideal si tienes que transportar el postre fuera de casa.
Pero es que además es una forma ideal de aprovecharnos de los beneficios del plátano, que son muchos: es una estupenda fuente de energía, tiene muchas vitaminas, fibra,... Recomendado especialmente para deportistas y niños. Y... me da a mí que si le ponéis uno de estos vasitos a los peques en la merienda se encargarán de dejarlos bien limpios.
Los vasitos nos hacen la vida más sencilla. Y es que son perfectos para esas comidas/cenas fuera de casa a las que te toca llevar el postre. Se transportan estupendamente, ya que podemos cubrirlos con un poco de papel film y ponerlos dentro de una caja. Aunque también hay unos vasitos con tapa que son la mar de prácticos.
Pero si en lugar de servir este postre en vasitos, queréis servirlo en forma de tarta, ¡también podéis hacerlo! Los pasos son los mismos, sólo que lo iréis haciendo con un molde más grande. En ese caso, os recomiendo doblar las cantidades para que nos quede una tarta más o menos aceptable en cuanto a tamaño.
¡ Y sin más, vamos con la receta!
Para 6 vasitos
Para la base y cobertura:
- 200 gr. de galletas tostadas
- 1 cucharada sopera de cacao en polvo
- 1 cucharada de canela molida
- 1 cucharada de jengibre molido
- 70 gr. de mantequilla
Para el cremoso:
- 2 yogures naturales desnatados
- 2 plátanos
- 4 cucharadas soperas de azúcar
- 1 sobre de cuajada
- Zumo de medio limón
- 250 ml. de leche
Además, necesitaremos: una picadora, batidora de mano y unos vasitos.
Comenzaremos preparando la base de galleta:
- Trocearemos las galletas y las picaremos con la picadora. Nos sirve la típica picadora que viene con la batidora manual. De esta forma, conseguiremos que las galletas queden reducidas a polvo.
- Una vez que hemos reducido las galletas a polvo, las pondremos en un bol. Mezclaremos con el cacao en polvo y las especias.
- Fundiremos la mantequilla en el microondas. Con 30 segundos a máxima potencia será suficiente.
- Mezclaremos la mantequilla con la galleta, el chocolate y las especias, hasta que veamos que está todo bien integrado.
- Pondremos mezcla de galleta en el fondo de cada uno de los vasitos. Debe quedar una base de un dedo de grosor, aproximadamente.
- Los llevaremos a la nevera hasta que volvamos a necesitarlos.
¡Os sobrará galleta molida! ¡No os la comáis, la vamos a utilizar a modo de cobertura en el último momento!
Seguidamente preparemos la parte cremosa de los vasitos:
- Pelaremos los plátanos y los cortaremos en rodajas. Retirad la puntas que suelen estar un poco más duras.
- Verteremos el zumo de limón sobre las rodajas de plátano. Añadiremos también el azúcar y lo mezclaremos todo.
- Incorporaremos los dos yogures y el sobre de cuajada.
- Lo trituraremos todo con la batidora, hasta que no quede ningún trozo.
- Calentaremos la leche en el microondas hasta que esté a punto de hervir.
- Añadiremos la leche a la mezcla de plátano y volveremos a batir hasta que nos quede una crema líquida (Aviso: si en este momento probáis la mezcla, moriréis de amor, ¡seguro!)
- Sacaremos de la nevera los vasitos e iremos añadiendo la mezcla cremosa. He calculado unas 8 cucharadas soperas para cada vasito, pero todo dependerá del tamaño que utilicéis.
- Los cubriremos con papel film y los llevaremos a la nevera durante 3 o 4 horas como mínimo.
- Por último, les pondremos un poco más de galleta por encima y los decoraremos como más nos guste: podéis ponerle rodajas de plátano (ésto en el momento justo de servir, porque tienden a oxidarse rápido), unas hojas de menta,...
¡Y listo!
Y puestos a crear recetas sanas que nos ayuden a incorporar el plátano a nuestra alimentación, me he topado con éste delicioso bizcocho de plátano y chocolate, donde la fruta aparece perfectamente camuflada para aquellos que no suelan tomarla a menudo.
Y, mucho más sencillo, podéis tomarlo en forma de batido. ¡Sí, sí, no os privéis de tomaros un rico batido de plátano!
Gracias por suscribirte, Un beso. Chus
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