¿No sabes que hacer hoy de comida y tampoco dispones de mucho tiempo? Tengo la solución a tu problema con la receta de hoy, unas saludables y riquísimas alcachofas con jamón, hechas en el microondas.
Utilizamos poco el microondas y mal. La mayoría lo usamos solo para calentar y tenemos la idea de que los alimentos en el microondas no se cocinan bien, que las ondas son malas, malísimas y miles de historias similares. Os animo a que perdáis el miedo a usarlo en vuestras recetas.
Además desde el punto nutricional es estupendo ya que se conservan mucho más los minerales y vitaminas al cocinarse los alimentos en su propio jugo, sin necesidad de añadir agua. Motivo por el cual se conserva más el sabor, color y aroma.
Es importante no salar los alimentos antes de cocinarlos, ya que debido a la conservación de sales internas, hay veces que no es necesario adicionar sal y a parte si la añadimos antes, los podemos resecar. Recordar que un minuto de microondas equivale a 6 o 7 minutos en la cocina tradicional.
Como apunte final os diré que las tapaderas con agujeros que la mayoría tenemos para calentar, no valen para cocinar en el microondas, porque el agua del alimento se escapa por esos agujeros haciendo que éste se reseca, como muy bien habéis observado cuando usáis estas tapaderas para calentar platos con salsas en los cuales se suele formar una especie de costra por el borde. Para evitar esta sequedad usaremos recipientes de vidrio con tapadera (tipo pirex), un plato tapándolo con otro plato, tapa de silicona o film apto para microondas.
Después de estas nociones no me enrollo más y vamos con la receta.
500 g de alcachofas.
100g de jamón serrano en taquitos.
4 Cucharadas de aceite de oliva.
1 diente de ajo.
Cortamos el rabo de la alcachofa y eliminamos las hojas exteriores hasta que lleguemos a las hojas de color verde clarito.
Cortamos cada alcachofa en cuatro trozos y las sumergimos en un recipiente hondo con agua fría y un manojo de hojas de perejil que debido a la elevada cantidad de vitamina C que contiene evitará que se ennegrezcan nuestras alcachofas. Y así nos evitaremos usar limón que mata el sabor de la alcachofa.
En un recipiente hondo apto para microondas añadimos el aceite de oliva, un diente de ajo en láminas y el jamón, movemos bien para que se integre todo y lo ponemos a máxima potencia durante 1-2 minutos a máxima potencia. En este paso no tenemos que tapar el recipiente para que se sofrían bien.
Sobre el jamón añadir los cuartos de alcachofa bien escurridos, removemos de nuevo, tapamos y lo cocinamos a máxima potencia (900W) durante 4-5 minutos.
Una vez pasado ese tiempo, si estuviesen duras, las ponemos 1 o 2 minutos más o hasta que estén blandas.
Salamos si fuese necesario y ¡a comer!