Un Don Juan, ni más ni menos
¡Lo que hacía una buena percha y un traje más o menos decente!
Es cierto que era otra época. Incluso llevaba sombrero cuando la ocasión lo requería. Un saludo con el sombrero y las mujeres se derretían
Nunca se quiso casar. ¿Para qué, si las podía tener a todas?
Rubias, morenas, delgadas, no tan delgadas, altas, bajas feas, guapas. Le gustaban todas. Todas se rendían a sus pies
Vivía para la conquista. No como hoy, sino a la antigua
Galante, atento, caballerosa
En esos juegos pasaba días días, hasta que de ella conseguía todos sus encantos
Oportunidad de sentarse la cabeza tuvo muchas, pero huía del compromiso como gato del agua y en cuanto el juego se convertía en exigencias, desaparecía sin hacer ruido
Ahora, tumbado en la cama de la pensión donde vive, recuerda aquella época con pesar
En más de una ocasión tuvo que salir corriendo delante de un novio o de un marido resentido. Él no le hacía ascos a ninguna
¿En qué momento su modo de vida se convirtió en puro patetismo?
Ya no lo recuerda o no lo quiere recordar. Su última conquista está lejos, demasiado
Aquella época se quedó atrás y llegaron los años en que los seductores trasnochados dejaron de tener su gracia
Lo que antes era pura galantería y cortejo, se convirtió en perseguir a mujeres que no querían saber nada de él, que huían de sus intentos de ligoteo
Porque la seducción se convirtió, de la noche a la mañana, en ligoteo
Todo cambiaba y él se quedaba atrás. Ahora tenía que gastar su sueldo en lo que antes le salía gratuito
Así se veía ahora. En una habitación desvencijada de una pensión de mala muerte. En el armario, un traje desgastado, usado cada día, hiciera frío o calor
Sin ninguna compañía más que el recuerdo de las mujeres que había amado
Recuerdos que le dibujaban una sonrisa y le llenaban de lágrimas los ojos
INGREDIENTES
1 kg de almejas (las mías congeladas, sin ningún problema)
1 cebolla
1 pimiento verde
1 tomate maduro
4 dientes de ajo
1 cucharada de harina
200 ml de vino blanco
Aceite
Pimentón
Pimienta
Sal
Perejil
ELABORACIÓN
Picar la cebolla, el pimiento, los ajos bien pequeño
Pelar y quitar las pepitas del tomate
Cortar en cubos muy pequeños
Poner aceite en la cubeta
Menú Cocina
Sofreír la cebolla, el ajo y el pimiento
Añadir el tomate
Salpimentar
Sofreír hasta que pierda todo el agua
Desleír la harina en un poco de vino
Añadir a la cubeta
Remover hasta espesar
Añadir el pimentón
Remover
Añadir las almejas
Remover para que se unan sabores
Añadir el resto del vino
Cocinar hasta que evapore el alcohol y se abran todas las almejas, 2-3
Receta adaptada de las fichas coleccionables La cocina de mi abuela de Planeta de Agostini