Tiempo de preparación: 50 minutos
El bizcocho de yogur o torta de yogur es un clásico de los bizcochos. Creo que esta receta es una de las más famosas en todas las casas y, como no, en la mía también. Es fácil, rápido y no se necesita pesar ingredientes. Se usa como medida, para calcular las cantidades, el mismo vaso en el que viene envasado el yogur. En este caso son 125 ml. Se le llama bizcocho 1,2,3 por el número de vasitos que se emplean con los distintos ingredientes.
Este bizcocho es ideal como base para tartas porque tiene la consistencia suficiente para poder cortarlo por el centro, rellenarlo y decorarlo. Por ese motivo os lo presento sin decoración y desmoldado boca abajo, igual que un flan, así tenemos las pareces completamente lisas.
Se puede servir tal cual o con otros ingredientes que le aporten sabor, con vainilla, canela o cáscara de limón; aunque también existen recetas que utilizan zumos y compotas de frutas, chocolate fundido, café o queso cremoso, la base de muchos postres como veis.
En este caso he optado por preparar un bizcocho súper ligero, además es de esos postres que te quedan perfectos si sigues todos los pasos. Con la misma confianza podemos encontrar un montón de ideas en Aptc del supermercado del Corte Inglés, una web con una amplia variedad de recetas. He curioseado un poco su web y he encontrado otro bizcocho que tiene muy buena pinta, este bizcocho de maíz, que seguro encontraréis próximamente en el blog.
Ingredientes
1 yogur natural o de limón (125ml)
1 medida de aceite de oliva
2 medidas de azúcar
3 medidas de harina
16 g de levadura química o polvo de hornear
3 huevos
una pizca de sal
mantequilla o spray desmoldeador para engrasar el molde Bizcocho de yogur o torta de yogur: preparación de la receta
Ingredientes para preparar un bizcocho de yogur
1.- En un bol, bate los huevos junto con el azúcar y una pizca de sal. Usa varillas eléctricas o manuales.
2.- Cuando la mezcla esté esponjosa, incorpora el aceite y el yogur. Bate hasta que se integre por completo. El resultado es una crema esponjosa. Si no tienes aceite de oliva, usa el que habitualmente emplees en tu cocina.
3.- Añade la harina mezclada con la levadura química (polvo de hornear en algunos países) a través de un tamiz o colador. Mezcla todo con la ayuda de una cuchara haciendo movimientos envolventes para que no se escapen las burbujas de aire que hemos conseguido introducir al batir.
4.- Vierte esta mezcla en un molde forrado y engrasado con mantequilla o spray desmoldeador. Procura que la masa que nivelada. El molde empleado es de 24 cm de diámetro.
5.-Introduce la masa en el horno precalentado a 180º C durante 35 a 45 minutos. Colócalo a media altura con calor superior e inferior.
6.- Transcurrido ese tiempo, deberás comprobar que el bizcocho se ha hecho por completo pinchando con un palito de brocheta o aguja. Si sale limpio, es que ya está. si todavía sale algo húmedo, hay que dejarlo un poco más y comprobar de nuevo hasta que se haya cocinado por completo en su interior. Retíralo del horno y deja enfriar sobre el mármol.
7.-Una vez frío, ya lo puedes desmoldar. Si vas a usarlo como base de tarta, desmolda boca abajo para que las paredes queden completamente lisas.
Si te gustan los bizcochos te sugiero que veas estas recetas de : Bizcocho de chocolate blanco y Bizcocho de yogur con manzana y arándanos.
Te dejo con la receta, que es de lo más sencilla. Una perfecta combinación de sabores que recuerda a la cocina de casa, la de toda la vida. Un bizcocho para preparar con los más peques y desayunar casero. Puedes curiosear más recetas de postres en mi blog o en el del Corte Inglés.
Bizcocho de yogur clásico
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