Sé que llego un poco tarde con esta receta, pero he andado muy liado. Esta es una de mis recetas europeas navideñas que más me gustan. Son unos bollitos propios de Suecia y que ya los hice el año pasado en Megasilvita para nuestro libro Nordic Cook, junto a otra receta fantástica: Swedish Coffee Bread.
Son unos bollitos especiados (¡me encanta el cardamomo!) y que llevan un toque de azafrán, que les dota de ese color amarillento tan característicos. Son unos dulces que se consumen casi todo el año, pero son típicos del 13 de diciembre, del día de Santa Lucía. Aunque los podemos encontrar de muchas formas, la más típica es la forma de "S" y con pasas en los extremos.
La receta es sencilla, pero, como con todas las masas, hay que tener paciencia a la hora de respetar los tiempos y los levados, es la única forma de que los bollitos estén en su punto, esponjosos y se hagan bien. Podéis prescindir de las pasas... Yo lo haría, pero creo que es mejor ofrecer la receta con ellas, que es la receta tradicional.
Os dejo con la receta para que la disfrutéis y os animéis a hacerla estas Navidades. ¡Ánimo!
Bollitos de Santa Lucía
Dificultad: Media
Tiempo horneado: (aprox)
Raciones: 12 bollitos
Etiqueta: Aperitivo Dulce, Navidad
Trotamundos: Europa
Receta: Propia en Nordic Cook, de Megasilvita
Una cucharada de hebras de azafrán
175 ml de leche entera
30 gr de mantequilla en pomada
12 gr de levadura fresca
280 gr de harina de fuerza
1 cucharadita de semillas de cardamomo
50 gr de azúcar
Una pizca de sal
Un huevo mediano y uno batido para pintar
Dos pasas por bollito que salga
- Comenzamos calentando en un cazo la leche con las hebras de azafrán, hasta que hierva. Dejamos templar. La leche irá adquiriendo un tono amarillo muy bonito.
- Antes de que se enfríe del todo añadimos la levadura rompiéndola con los dedos; y la mantequilla. Damos vueltas para que se integre todo bien. Reservamos.
- En un bol amplio mezclamos la harina con las semillas de cardamomo, el azúcar y la sal. Añadimos la mezcla de leche del cazo y el huevo, batido ligeramente.
- Comenzamos a amasar. Podemos hacerlo con las manos o con un robot de cocina. Yo me he decantado por las manos en este caso.
- Cuando veamos que ya tenemos todos los ingredientes integrados y la masa se despega perfectamente del bol, la pasamos a una superficie de trabajo enharinada. Amasamos hasta conseguir una masa suave y lisa.
- Hacemos una bola y la colocamos en un bol previamente engrasado con un pelín de aceite. Cubrimos con papel film y dejamos reposar hasta que duplique su tamaño.
- Sacamos la masa del bol y la aplastamos con las manos con cuidado.
- Dividimos la masa en tantas unidades como queremos conseguir. Yo la dividí en 12 trozos de unos 45-50 gr cada uno. Hacemos una bola con cada uno y después la estiramos, formando un churro uniforme. Le damos forma de “S” girando cada uno de los extremos hacia un lado.
- Dejamos reposar unos 30-45 minutos, para que suban de nuevo.
- Colocamos una pasa en el centro de cada uno de los lados de la “S”.
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- Pincelamos con el huevo batido y horneamos durante 20 minutos, más o menos, hasta que los bollos estén dorados.
- Dejamos enfriar sobre una rejilla.
- Servimos en frío.
- Lo ideal es consumirlos a las pocas horas, pero aguantan bien envueltos en papel film. Al día siguiente están perfectos calentándolos 20 segundos en el microondas.
- Podéis ver el paso a paso en el libro online que sacamos en Megasilvita, Nordic Cook.