Con ½ kg. de gambitas arroceras y un poco de ganas, se consigue un plato estupendo para cenar con unos amigos. Así que nada, pendientes.
Para el buñuelo, necesitamos:
1 huevo
1 cucharada de sal
6 cucharadas de harina de fuerza
2 cucharadas de harina de garbanzo
¼ de cucharadita de pimentón
100 ml de agua templada
10 g. de levadura de pan
Azafrán
Perejil picado
1 cebolleta picada
½ kg. De gambas arroceras
Pimienta molida al gusto.
Aceite de oliva virgen abundante para freír
Para la salsa:
Las cáscaras de las gambas que hemos pelado
1 cebolleta
750 ml. De agua
1 cebolleta picada
4 dientes de ajo
2 cucharadas de harina
1 copa de brandy de Jerez
1 copa de manzanilla de Sanlúcar
1 cebolleta entera
1 ramillete de perejil
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 hoja de laurel
Comenzamos con los buñuelos. Vamos a mezclar todos los ingredientes y batirlos bien y los dejamos reposar y levar la masa con la levadura. Tapadito y cuando esponje, le añadimos las gambas peladas y salpimentamos. En unos 40 minutos, listo.
Para la salsa, colocamos en una ollita el aceite de oliva virgen extra y añadimos las cáscaras de las gambas. Lo refreímos bien y vamos machacando con una cuchara de madera las cabeza para sacar los jugos. Cuando nos da el olor potente en la nariz, añadimos el vino y el licor. 2 minutos reduciendo y ponemos el agua, la cebolleta entera y el perejil. Dejamos reducir unos 20 minutos y metemos batidora. Colamos y obtenemos un concentrado de marisco potente.
Sofrito con aceite de oliva virgen extra y la cebolleta y el ajo muy picado, primero el ajo y cuando de olor, la cebolleta y su hojita de laurel.
Añadimos la harina, tostamos y luego añadimos el caldo de marisco. Movemos para disolver grumos, salpimentamos y dejamos reducir hasta espesar, mientras que vamos friendo los buñuelos.
En una sartén con abundante aceite de oliva virgen, caliente pero a fuego medio, nos preparamos para freír los buñuelos. Esperamos a que esté caliente, pero no humeante. La sartén preferentemente honda, para que los buñuelos de hagan redonditos y no rompan. Con una cuchara tomamos la pasta, colocamos la misma sobre el aceite y con otra despegamos la pasta. Volteamos rápido los buñuelos en la sartén y cuando empiecen a estar dorado, sacamos y escurrimos en papel absorbente.
Ponemos el fondo del plato con la salsa y sobre ella los buñuelos. Delicioso plato.