INGREDIENTES
4 pechugas de pollo
Para empanar:
200 gr de harina de sémola CAPUTO RIMACINATA
4 huevos
170 gr de kikos
Para relleno:
20 gr de sal marina fina
pimienta al gusto
8 lonchas de queso para fundir
200 gr de jamón ibérico
150 gr de calabacín
ELABORACIÓN
Se colocan los ingredientes en la encimera, se ponen por separado en platos o cuencos los huevos y la harina, se trituran los kikos en la Thermomix a velocidad 5 durante 7, no deben de quedar molidos pero tampoco con tropezones.
Si el carnicero no nos ha preparado las pechugas deberemos hacerlo nosotros.
Se abren en forma de libro, quitamos los pellejos que queden, la grasita sobrante y si queda algún hueso.
Se salpimentan al gusto y se colocan dos, una al lado de la otra sobre una fuente.
Se va poniendo encima de las dos pechugas el jamón, el queso.
Se corta el calabacín a rodajas de 0.5 cm se salpimentan al gusto y se ponen encima del todo.
Salpimentadas las dos pechugas que quedan se ponen encima de todo el relleno.
Como se ven en la foto los platos colocados cogemos todo el bloque de carne relleno y se reboza en el plato de la harina, después se baña en el de los huevos batidos y por último se pasa por el del plato de los kikos triturados.
Faltan algunas fotos pero es normal con mis prisas y estando sola para toda la preparación, así que tendréis que disculparme.
Precalentamos el horno arriba y abajo a 220º hasta alcanzar la temperatura.
Introducimos la bandeja durante 45.
Siempre habrá que tener en cuenta para el tiempo de horneado el grosor de la pechuga y todo su relleno.
No creáis que se me ha olvidado el aceite, es que no lleva.
Aquí el cachopo salido del horno.
Riquísimo. Comimos tres personas y hubo suficiente. Lo acompañamos con patatas fritas.
Espero que os guste.