¡Por fin hemos podido hacer nuestro propio chocolate blanco sin lactosa casero! Cuánto tiempo sin comer chocolate blanco eh? Y es que es muy complicado encontrar chocolate blanco sin lactosa en los supermercados. Hay un par de marcas (Sweet Williams y Frankonia) el primero de ellos vegetal (con leche de soja), pero a no ser que lo compréis por internet, es muy difícil encontrarlo.
Es más fácil hacer el chocolate blanco sin lactosa casero en casa. Sólo necesitamos un molde de tableta de chocolate de silicona (yo lo he comprado en Amazon por sólo 3 euros), manteca de cacao, leche sin lactosa o leche de soja en polvo, azúcar glacé y opcionalmente esencia de vainilla.
El ingrediente fundamental para hacer chocolate blanco casero es la manteca de cacao. La manteca de cacao es la grasa natural procedente del haba del cacao. Te la venden en trozacos polimorfos e irregulares. Es sólida a temperatura ambiente, súper dura. Y debemos fundirla al baño maría, suavemente y qué casualidad, funde a 36ºC, justo la temperatura corporal de un humano.
¿Dónde comprar manteca de cacao?
Yo la he comprado por internet al peso en una tienda online de repostería que me ha encantado, a 17,29€ el kilo (una tableta de chocolate blanco casero nos cuesta 1,10€ de manteca de cacao). Pero podéis encontrar también manteca de cacao en tiendas especializadas de repostería o incluso en algunas farmacias. ¿Por qué en farmacias? pues porque la manteca de cacao se usa también para elaborar productos cosméticos.
El otro ingrediente fundamental es la leche en polvo sin lactosa. Este es bastante más complicado de encontrar. Si no lo encontráis, podéis usar leche de soja en polvo, que podéis comprar en herboristerías o en algunos supermercados. Cambia un poco el sabor, pero también tendremos chocolate blanco sin lactosa.¿Dónde comprar leche en polvo sin lactosa?
Yo he podido conseguir la leche en polvo sin lactosa gracias a una heladería que conozco que hace helados sin lactosa (buenísimos por cierto), tanto entera como desnatada, que les distribuye en sacos de 25 kilos una empresa llamada Innova Food Ingredients (del grupo Central Lechera Asturiana), pero sólo a nivel industrial en grandes cantidades y no distribuyen al por menor. No se puede comprar aún un kilo de leche en polvo sin lactosa en la tienda por desgracia. Así que intentad buscar alguna heladería de confianza y preguntar allí.
Chocolate blanco vegano
Si no queréis tomar ningún tipo de lácteo bien porque sois veganos o bien porque sois alérgicos a la proteína de la leche de vaca, podéis hacer vuestro propio chocolate blanco vegano, sin leche. Usando la leche de soja en polvo, que como he dicho podéis encontrar en herboristerías.
Así que una vez fundida la manteca de cacao al baño al baño maría (a fuego medio, que el agua no lleve a hervir ni entre en contacto con el recipiente donde derretimos la manteca de cacao), retiramos del fuego para que no se corte la mezcla con los otros ingredientes por exceso de temperatura. Integramos el azúcar glacé y la leche en polvo y mezclamos muy bien para no tener grumos. Podemos darle un toque extra de sabor a nuestro chocolate blanco sin lactosa casero con unas gotas de esencia de vainilla, preferiblemente transparente para que no le de mucho color.
He probado muchas fórmulas para hacer chocolate blanco sin lactosa casero. Muchas usan lecitina de soja (que es un emulsionante natural), pero yo sólo lo encontraba granulado y no líquido. Y cómo no me convencía cómo quedaba porque no terminaba de disolverse bien, he decidido no usarla. Además, sin usarla también queda bien compacta la tableta de chocolate blanco. Opcionalmente podéis añadir también una pizquita de sal.
Problemas que podemos encontrarnos al hacer chocolate blanco sin lactosa casero
Se nos corta la mezcla: esto me ha pasado a mi en varias ocasiones por usar demasiada leche en polvo y por mezclar los ingredientes en el propio baño maría. El exceso de temperatura hace que la mezcla se corte y se forma una pasta que no termina de integrarse.
No solidifica: esto puede ocurrir cuando hemos usado muchos líquidos (leche líquida en vez de en polvo, o demasiada esencia de vainilla) o cuando hace demasiado calor. Ahora en verano no es muy aconsejable hacerlo. O si lo hacemos mejor en una habitación fresca con aire acondicionado.
Tiene una textura muy granulosa: hemos usado una proporción desequilibrada de ingredientes o no hemos mezclado bien el azúcar y la leche en polvo para disolverla completamente hasta que no quede ni un grumo.
No sabe a chocolate: esto ocurre si no usamos manteca de cacao y usamos otras grasas vegetales como margarinas o aceites de coco, etc.
No puedo tomar tampoco soja: si sois intolerantes a la fructosa o la soja tampoco os sienta bien, podéis usar leche de almendras en polvo, que podéis encontrar en supermercados o herboristerías.
Dicho esto, espero que no tengáis problemas en hacer vuestro chocolate blanco sin lactosa casero, y os salga a la primera.
Con las cantidades que os doy os sale para una tableta de unos 100 gr. Si os sobra porque vuestro molde es más pequeño podéis hacer bombones de chocolate blanco :) Y con el chocolate blanco haremos un montón de postres (tarta 3 chocolates, tarta de queso y chocolate blanco... uff)
Aquí os dejo la receta para hacer chocolate blanco sin lactosa paso a paso:
Ingredientes
Tableta de 100 gr.:
- 65 gr. de manteca de cacao
- 27 gr. de azúcar glacé
- 4 gr. de leche en polvo sin lactosa o leche de soja en polvo
- ½ cdita. esencia de vainilla.
Preparación
Chocolate blanco sin lactosa
Fundir la manteca de cacao al baño maría sin que el agua llegue a hervir y sin que el recipiente de la manteca toque el agua.
Cuando se haya fundido totalmente, retirar la manteca del fuego.
Mezclar en un cuenco el azúcar glacé con la leche en polvo sin lactosa, y añadir a la manteca de cacao derretida.
Mezclar rápidamente para deshacer todos los grumos.
Añadir unas gotas de esencia de vainilla (a ser posible transparente) y mezclar.
Verter en un molde para tabletas de chocolate.
Dejar enfriar a temperatura ambiente durante 20 minutos en una habitación fresca.
Cuando no esté tan líquida, metemos el molde en la nevera con la ayuda de una base para que no se derrame, al menos una hora, hasta que esté completamente sólido.