- ¡Hola! ¿Sabes que he conocido a ‘Fulano?
- ¿Sí? ¿Y qué tal es?
- Pues muy Normal
¿Os suena esta conversación? Vivimos en la era en la que la normalidad es un valor en alza os queremos presentar esta rica ensalada de garbanzos y bonito del norte, muy normal, muy sencilla, muy rica y muy sana. Además que escribo esto a las puertas de comenzar mi dieta, esa que me devolverá a la talla 40, espero, y creo que me estoy mentalizando, cosas sencillas y nutritivas
No sé donde leímos hace un tiempo que comer legumbres es necesario al menos 2 veces a la semana y que además ayudaba a prevenir el Alzehimer, esa enfermedad tan chunga que nos hace perder nuestros recuerdos y sin recuerdos o vivencias la vida deja de tener mucho sentido. No sé si será verdad pero en casa la legumbre es base de nuestra alimentación, ya sean lentejas, judías o garbanzos.
Y sí, puede parecer muy normal pero como muchas veces, la belleza está en el interior y es que la ensalada es simple, lo sé, pero no así los ingredientes que le aportan su sabor:
Así, está regada, toda ella, con el aceite de oliva virgen extra Living & Olive, presentada en latitas de 250 ml, que según nos explicaron en la D.O de Priego es un sistema de conservación del aceite fabuloso. En este caso, viene del bajo Aragón y se trata de un coupage (me encanta esta palabara, por cierto) de las suaves variedades arbequina y empeltre que le aportan un delicado color amarillo y es que amigos, no todo el aceite es verde, que te quiero verde. Cuestan unos 6 euros, se venden en packs de dos unidades y por muy poquito más tenemos la oportunidad de personalizar nuestras latas, pero mejor os lo miráis en su web, como regalo es muy original ¿no?
¡Ojo! que el bonito del norte tampoco es uno cualquiera ¡Nones! es de arroyabe y te mueres de lo bueno que está. Empresa familiar, mimo, dedicación y una apuesta fuerte por el producto y se nota ¡Hala! a mirar su web de conservas y a quedarse muertas ‘sánchez’. Sé que suena a publicidad pura y dura pero no, en serio es un producto de calidad.
Para acompañarla se nos ha ocurrido este pan rápido de aceitunas negras, que ya lo publicamos y más de uno vimos por ahí pero para que nadie se quede sin hacerlo, aquí tenéis el vídeo. También es un pan muy normal y pensamos que es el compañero perfecto.
Ensalada de garbanzos y bonito del norte
Para 4 personas
Dificultad | Fácil
¿Qué se necesita?
300 gr de garbanzos, bonito del norte Arroyabe, tomates maduros, 2 huevos duros, 1 cebolla, sal, pimienta, orégano y aceite de oliva Live&Olive
¿Cómo se hace?
La noche de antes ponemos los garbanzos a remojo, con agua templada y una cucharadita de sal. Al día siguiente, por la mañana, los cocemos. La calidad de la legumbre es básica en el éxito de nuestra receta. En casa tomamos unos que trajo mi padre de La Mancha y que los cultiva un conocido suyo. Ponemos agua a hervir y cuando esté burbujeando, añadimos los garbanzos y en unos 20-25 minutos estarán listos. Depende de la dureza del agua y de la legumbre. Y si no os queréis liar pues los comprais cocidos y a correr.
A su vez podemos ir cociendo los huevos, en un cacerola con agua, tardan unos 10 minutos. Luego cuando enfríen, a la nevera.
Escurrimos los garbanzos y los ponemos en un recipiente, tapado para que no se resequen y cuando hayan templado, los llevamos al frío ¡Señores que esto es una ensalada! ¡De Verano!
Y luego es tan fácil como picar la cebollita en juliana (recordad que si queréis que pique menos la podéis poner unos minutos antes con agua y sal, además estará más blandita), el tomate en gajos y el huevo cocido en rodajas. La cosa está en ponerlo todo así un poco ‘cuqui’ como en la foto y regar con aceite de oliva, sal y pimienta.
¡Lista! que esto tiene menos misterio que la tal Laura de TVE.
GatoConsejos
A mi a esta ensalada de garbanzos y bonito del norte me gusta añadirle alcaparras pero no había y mira tampoco vamos a hacer un drama, os lo digo por si queréis probar. Sin más. CatCookers (GatoCocineros, en el idioma de Cervantes) ¡Nos vemos la semana que viene!