Faldas de una merluza infestadas de anisakis - Fotografía de The Traveller Cook
Ya no basta con congelar el pescado 48 horas antes de su ingesta. Tras la aparición de varios casos de intoxicación por anisakis después de haber consumido pescado congelado, las autoridades sanitarias, aumentan a 5 días el tiempo mínimo de congelación para los productos del mar que vayan a servirse crudos o cocinados por debajo de los 60ºC. Para ello, el pescado, bien limpio, debe congelarse a -20ºC en menos de 2 horas. En caso de que el restaurante no disponga del equipamiento adecuado para asegurar dicho proceso, el producto deberá de permanecer congelado por al menos una semana, medida que deberá de ser aplicada también en los hogares.
Hasta ahora no habían ocurrido casos de intoxicación por anisakis tras haber consumido pescado congelado. Según Javier Aranceta, presidente del comité científico de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), "A las larvas de Anisakis les pasa como a los virus y las bacterias, luchan por su supervivencia y progresivamente se van haciendo más resistentes. Ahora bien. una correcta manipulación y cocinado nos permite disfrutar plenamente de los productos del mar, especialmente en verano, que es una buenísima temporada".
Euskadi, junto a Madrid, Andalucía y Cantabria, son las comunidades más afectadas por el anisakis, con una medía de 30 intoxicaciones por cada 100.000 habitantes.
Este parásito con forma de gusano se encuentra especialmente presente en las faldas de la merluza y otros pescados blancos, aunque hace años ya que perdieron su preferencia por estos pescados magros y semigrasos siendo ya común encontrarlos también entre el atún, bonito, sardinas y otros pescados azules. El 80% de las intoxicaciones en Euskadi están provocads por la santxoas y boquerones, siendo los marinados y el pescado crudo los causantes del 90% de las intoxicaciones.
Alergias e intolerancias
La mayoría de las veces, la persona que ha sido intoxicada por anisakis ni se cuenta de ello. Los síntomas leves: molestias digestivas, malestar tras haber comido e incluso urticaria. El problema se presenta en el caso de padecer alérgia o intolerancia al parásito:
En caso de intolerancia las medidas presentadas anteriormente bastan para evitar la anisakiasis o intoxicación por anisakis. Si es alergia, la sola presencia del "bicho" basta para producir problemas como fiebre, fuertes dolores de estómago, diarrea aguda, mareos y, en el peor de los casos choque anafiláctico, pudiendo llegar a ser mortal.