Estofado Irlandés de Guinness
Mañana, 17 de marzo, es San Patricio y, a modo de guiño a esta fiesta que cada vez se celebra más en España, he querido preparar una receta típica de ese país tan bonito, tan verde y tan mágico y, es que, si aún no has tenido la oportunidad de conocer Irlanda, deberías incluirla en uno de tus próximos destinos porque, de verdad, que es un país de ensueño.
Para este estofado he utilizado algo tan típico irlandés como es la cerveza Guinness y, precisamente eso es lo que le da el sabor tan característico y potente al guiso de hoy.
Este estofado está de rechupete, perfecto para rodearte de los tuyos y pasar un día en familia disfrutando de un buen estofado para el que, ya te voy avisando, vas a necesitar pan (integral mejor)
Además, con esta receta estreno canal de Instagram TV (aquí tienes el enlace) y, pensando en todos aquellos que no tenéis Instagram ¡¡CANAL DE YOUTUBE!! (haz click aquí para ver la receta paso a paso)
Me hacía muchísima ilusión empezar a subir recetas en vídeo para que así puedas seguir el paso a paso de forma mucho más visual y más cercana también.
Así que, para no perderte ni una receta de las que suba en vídeo, sólo tienes que suscribirte al canal de Youtube o seguirme en Instagram (o ambas jeje)
Como sabes si me lees desde hace tiempo, no tengo olla express, así que todos estos platos de cucharas son bastante tradicionales. Si tienes olla, sólo tienes que programar el tiempo según las instrucciones que marque el fabricante para los estofados.
Si quieres más ideas de platos de cuchara para disfrutar antes de que llegue el calorcito, aquí te dejo dos recetas espectaculares, tradicionales y en su versión más saludable que ya subí anteriormente: patatas con setas y gambas y lentejas light.
Y ya no me enrollo más, que seguro que estás deseando hincarle el diente a esta delicia irlandesa. Así que, coge papel y boli y, ¡al lío!
Ingredientes (4 – 6 raciones, depende del hambre que tengáis):
800 gr. de carne de ternera de añojo
2 dientes de ajo
1 puerro mediano
1 cebolla grande
3 zanahorias grandes
2 patatas grandes
3 tomates (puedes sustituir por tomate tamizado de mercadona)
3 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
2 vasos de agua
1 tercio de cerveza Guinness Original
2 hojas de laurel
1 y 1/2 cucharadita de postre de mezcla de hierbas provenzales (puedes usar tomillo, albahaca, perejil o las que más te gusten)
Sal al gusto
Pimienta
Opcional: 1/2 pastilla de caldo de pollo
Procedimiento:
Añade dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra en una olla suficientemente grande. Pon a calentar el aceite y, mientras tanto, lava bien el puerro y lo vamos picando. No hace falta que sea extremadamente pequeño, ya que, en un guiso, siempre queda bien encontrar los diferentes ingredientes.
Cuando el aceite esté caliente, añade la ternera y salpimenta al gusto. Ponla al máximo porque lo que queremos es sellarla en un par de minutos para que, cuando cueza, no quede dura. Mientras tenga la carne sellando, no pares de remover y, cuando veas que todos los lados han quedado sellados (no más de 2 o 3 minutos), sácalos con ayuda de unas pinzas y reserva.
Añade una cucharada más de aceite al sobrante donde hemos cocinado la carne y que tiene todo el sabor de ésta. Añade el puerro y baja el fuego al mínimo, mientras tanto, pica los dientes de ajo y la cebolla y agrégalos junto al puerro.
Sube el fuego a medio/bajo y, mientras se cocina, lava y pela las zanahorias. Córtalas en rodajas o en mitades, como a ti más te guste (yo opto siempre por rodajas).
Cuando la cebolla esté transparente, añade las zanahorias y mueve para que se mezclen bien todos los ingredientes.
Seguidamente, vamos a lavar muy bien las patatas y a cortarlas en cachelos. Como las patatas que he usado eran nuevas, las he lavado bien con un cepillo para no tener que pelarlas y quitarle gran parte de los nutrientes de la piel, pero si las pelas tampoco pasa nada.
Añade las patatas al resto de las verduras y mueve todo bien.
Lava y corta en cuadraditos los tomates (lo harás mejor con un cuchillo de sierra). Es importante que los tomates estén en su punto, para ello, debes elegirlos que tengan un color rojo uniforme y que en la parte que los une al tallo, estén rojos y no verdosos. Si optas por usar tomate tamizado, simplemente añade un buen chorretón al guiso y mueve todo bien.
Cuando tengas los tomates picados añádelos a la cazuela juntos con las hierbas provenzales y sube el fuego al máximo, deja cocinar un par de minutos y agrega el tercio de Guinness. Deja cocer un par de minutos para que se evapore el alcohol y añade el agua hasta que cubra los ingredientes al ras. No pongas agua de más, ya que si no quedará muy ahogado y con poca potencia de sabor. Si añades la media pastilla de caldo, ahora es el momento.
Pon las hojas de laurel y, cuando comience todo a cocer con fuerza, baja el fuego a una potencia media y deja durante 10 minutos.
Prueba el sabor y rectifica de sal si es necesario.
Transcurridos esos 10 minutos, pon la tapadera y deja cocer otros 10 minutos o hasta que las patatas estén blanditas cuando las pinchas con un cuchillo.
¡Emplata el estofado y a comer!
Como ves, es un guiso muy fácil de preparar con el que te marcas una comida de lujo en un momento y sin necesidad de ser un súper chef.