Este finde teníamos ganas de hacer un gazpacho bien fresquito como primer plato y, dado que ya no es temporada de fresas, pensamos en hacerlo de sandía (como este que ya publiqué) o de melón, cerezas... pero cuál fue nuestra sorpresa al descubrir en el supermercado que aún quedaban unas bandejas pequeñas de fresas... vale, no serán de temporada, pero teníamos el antojo y nuestros deseos fueron escuchados...
Así que, sin pensarlo, cogimos nuestra cajita de fresas, unos buenos tomates de pera y al lío, eso sí, lo hicimos sin pan, lo cual no supuso ningún problema, primero porque se nos olvidó comprarlo, y segundo porque así es más ligerito (y porque estoy pendiente que me diga el médico los resultados de unos análisis para ver si soy intolerante...).
Con estas cantidades sale como para 4 - 6 personas:
Ingredientes:
- 1,200 kg de tomates de pera
- 250 gramos de fresas
- 1 pepino
- 1 diente de ajo pequeño-mediano
- Aceite de oliva
- Vinagre al gusto
- Sal
- Un poquito de agua
Elaboración:
1. Empezamos lavando bien los tomates y las fresas y lo cortamos todo en trozos (los tomates sin pelar) y lo echamos al vaso de batidora que vayamos a utilizar.
2. Pelamos el diente de ajo y le quitamos el germen interior. Lo añadimos a la batidora.
3. Pelamos el pepino y lo cortamos en trozos, lo añadimos también.
4. Agregamos un buen chorro de aceite de oliva, el vinagre y la sal al gusto.
5. Trituramos a máxima potencia hasta que obtengamos un puré. Si lo hacemos en thermomix, serían 30 seg/vel 5.
6. Probamos de sal y le añadimos un poco de agua, depende de lo líquido que lo queramos (si lo vamos a beber en vaso o a comer con cuchara) y trituramos de nuevo a máxima potencia hasta que esté todo perfectamente diluido e integrado. En thermomix programaríamos 1 min/vel 5-10 progresiva.
7. Ya podemos servir con lo que más nos guste: huevo duro, jamón serrano picadito...