Aunque casi todo el mundo opta por los pasteles y cupcakes para las celebraciones, cada vez son más las personas que se decantan por una gelatina decorada. Por increíble que parezca, no todo el mundo es fan de los bizcochos ni de las cremas, a muchos niños no les gustan las tartas, y una gelatina como esta puede ser perfecta para una celebración de cumpleaños.
Vais a ver que no tiene gran misterio, es muy muy fácil de hacer y además está buenísima. Muy fresquita para el tiempo que se acerca, y no requiere grandes conocimientos reposteriles.
En este caso hemos hecho una gelatina en dos capas, una de leche condensada y la otra de arándanos, en colores acordes con la temática elegida (cómo no! Frozen).
Pues ahí va la receta de la gelatina decorada!
Ingredientes (para la gelatina de leche condensada)
1/2 taza de leche condensada
1 1/2 tazas de agua (a poder ser agua mineral o agua filtrada)
1/2 taza de azúcar
2 1/2 cucharadas de gelatina en polvo sin sabor
1 cdta de esencia de vainilla incolora
Para la gelatina de arándanos
1 1/2 tazas de agua
1/2 taza de azúcar
2 1/2 cucharadas de gelatina en polvo sin sabor
1 cdta de esencia de arándanos
Colorante azul (en este caso he utilizado el Royal Blue de Wilton)
1 oblea de papel de azúcar
Preparación
Vamos a comenzar con la elaboración de la gelatina de leche condensada (blanca) ya que es la que irá abajo en el molde y la utilizaremos para decorar sobre ella.
Ponemos a hervir el agua con el azúcar en un cazo. Cuando rompa a hervir añadimos la gelatina en polvo y removemos hasta que se haya disuelto por completo. Añadimos la leche condensada y la esencia de vainilla y removemos.
Vertemos en un molde de silicona previamente engrasado (este paso me lo salté y de ahí que se me rompiera un poco al desmoldar, craso error!!!). Dejamos reposar en la nevera durante un par de horas hasta que comprobemos que ha cuajado.
Cuando tengamos la primera capa lista, comenzaremos con la gelatina de arándanos (la azul). De nuevo ponemos a hervir el agua junto con el azúcar. Cuando rompa a hervir, agregamos la gelatina en polvo y mezclamos bien hasta que se disuelva. Añadimos la esencia de arándanos y colorante azul con ayuda de un palillo.
Vertemos la mezcla anterior sobre la gelatina blanca que ya se había solidificado y dejamos enfriar en la nevera.
Una vez tengamos la gelatina lista, vamos con la parte más divertida. Si tenéis niños en casa, seguro les encantará. No tiene ninguna complicación, me recuerda a las calcomanías que nos poníamos a modo de tatuaje cuando éramos pequeños. Y es que, es el mismo sistema para transferir el dibujo a la gelatina.
Pues bien, desmoldamos la gelatina, y nos quedará la parte blanca hacia arriba. Cogemos la oblea que vayamos a utilizar y la ponemos boca abajo sobre la gelatina (es decir, que el dibujo quede pegado en la gelatina). Dejamos reposar durante unos 15 minutos y levantamos con cuidado la oblea, comprobando que el dibujo haya quedado transferido.
Y así de fácil tenéis una gelatina decorada para vuestros peques!