INGREDIENTES (25 gyozas)
Para la pasta wonton:
250 grs de harina de trigo
125 ml de agua caliente
1 cdta de sal
Para el relleno:
350 grs de carne picada de cerdo
60 grs de cebolleta
3dientes de ajo grandes
80 grs de repollo o lechuga
1 cda de salsa de soja
1 cda de jengibre fresco rallado o en polvo
1 cdta de maicena
1 cdta de azúcar
Para la salsa:
3 cdas de salsa de soja
15 cdas de vinagre de arroz
1/2 cda de aceite de sésamo
PREPARACIÓN
En un bol grande añadimos la harina, la sal y el agua y mezclamos un poco. Amasamos muy bien durante unos 10 minutos hasta que nos quede una masa firme. La envolvemos en film y la dejamos reposar 20 minutos.
Mientras, preparamos el relleno. Picamos muy bien la cebolleta, el ajo y la lechuga y lo mezclamos todo muy bien junto con la carne, el jengibre, la salsa de soja, el azúcar y la maicena. Reservamos.
Dividimos nuestra masa en cuatro bolas. Cogemos una de ellas y el resto las envolvemos para que no se sequen. Con ayuda de un rodillo o con una máquina de hacer pasta estiramos la masa hasta que tenga 1 mm de groso. Con ayuda de un molde circular de 10 cm vamos cortando las porciones. Enarhinamos cada porción por arriba y por abajo con un poco de maicena. Hacemos lo mismo con el resto de bolas.
Para rellenar cogemos una porción de pasta y le ponemos en el centro un poco de nuestro relleno de carne (no mucho ya que si no luego no lo podremos cerrar). Mojamos con los dedos los bordes de la pasta y la sellamos doblándola por la mitad. A continuación hacemos tres pliegues en cada lado y presionamos un poco para que queden bien cerradas. Repetimos el proceso hasta tener lista todas las gyozas.
*Pincelamos una sartén con un poco de aceite de oliva y dejamos que se doren un par de minutos. A continuación añadimos un poco de agua (que cubra un dedo y medio la sartén) con 1/2 cdta de maicena disuelta (esto hará que luego quede una costra muy rica). Tapamos la sartén dejando que se cocinen durante diez minutos.
Mientras preparamos la salsa: mezclamos la salsa de soja, el aceite de sésamo y el vinagre de arroz.
Cuando el agua se haya evaporado las gyozas estarán listas: crujientes por la base y jugosas por dentro.
*Es importante que sea una sartén antiadherente para que luego no se os queden pegadas las gyozas.