Hoy me apetecía comerme una hamburguesa como las de antes. Pero tengo claro que no me voy a volver a comer una hamburguesa de carne nunca más. Buscaba una textura y un sabor similar a las hamburguesas de origen animal pero sin que ningún ser sintiente tuviese que pagar con su vida por este capricho mío. Y decidí hacerme esta deliciosa hamburguesa de soja que ha resultado sencillísima de hacer y acompañada de una rica salsa barbacoa casera que he echo en un pispas y acompañada de aguacate, pepinillos, lechuga. El sabor y la textura, insuperables. Y sin sufrimiento animal.
Antes de daros la receta quiero aclarar que no suelo comer soja de manera habitual. Ante las muchas preguntas que recibo a diario sobre la conveniencia o no de tomar soja decidí a escribir este artículo en el que yo me baso a la hora de preparar un plato con soja de manera ocasional. Espero que el artículo os sirva y que os guste la receta.
http://lacucharaverde.blogspot.com/2014/06/soja-si-o-soja-no.html
Ingredientes:
Para la hamburguesa
6 cucharadas de soja texturizada fina ( en seco sin hidratar)
6 cucharadas de harina de trigo
2 cucharadas de soja
hierbas aromáticas al gusto
1/2 vasito de agua
Pimenton opcionalPara la salsa barbacoa:
2 cucharadas de soja
1 cucharada de ketchup
1 cucharada de ajo en polvo
1/2 cucharada de melaza o 1 cucharada de azúcar moreno integral
1/4 de vaso de agua Preparación:
Para hacer la masa nada más sencillo que mezclar en un bol con la soja ( en seco sin hidratar ) y poco a poco el resto de los ingredientes.Primero añadimos las hierbas aromáticas al gusto y yo en esta ocasión le añadí una cucharadita de pimentón de la Vera. Después añadí la soja y mezcle bien. Añadir las 6 cucharadas de harina y remover y por último el agua, teniendo en cuenta que debe de quedar una masa homogénea, ni muy blanda ni muy dura.
Puedes darle la forma con un aro de emplatar o directamente con la mano. Como a mi me gustan gorditas, las hice con la mano.
Las hice en una sartén con un poquito de aceite de oliva, justo para que no se peguen y en el último mínuto de cocción las barnicé con la salsa barbacoa casera que explico más abajo. Este toque les añade un sabor delicioso y un toque brillante y jugoso.
Para la salsa simplemente tuve que llevar a ebullición todos los ingredientes y remover de vez en cuando, unos tres o cuatro minutos hasta que la salsa se reduzca y espese.
Y el resto ya es echarle imaginación: La puedes servir con verduras, con arroz, con papas o de la manera tradicional, en su panecillos de sésamo, con lechuga, tomate, y demás aderezos que te apetezcan. Yo en esta receta le he añadido pepinillos en rodaja en vinagre y unas rodajas gruesas de aguacate. Hemos rebañado el plato. No digo más!