Supongo que este curioso postre nació de la necesidad de aprovechar las claras que sobraban después de hacer las natillas. La verdad que es un forma deliciosa de aprovecharlas. Para hacer estas islas flotantes no hay más elaboración que añadir unos merengues a las natillas. Aquí tienes una sencilla receta para prepararlas.
INGREDIENTES (4 personas):
8 huevos
100 gramos de azúcar
1 litro de leche
1 vaina de vainilla o 1 cucharada de esencia de vainilla
Caramelo para decorar
ELABORACIÓN
Ponemos un cazo al fuego y añadimos la leche con la vaina de vainilla. Calentamos a fuego medio.
Aparte, separamos las claras de las yemas. Batimos las yemas con el azúcar, hasta que espumen y blanqueen.
Cuando la leche haya hervido apartamos del fuego, añadimos poco a poco las yemas batidas y movemos muy bien y enérgicamente para integrar con las yemas y que éstas tomen temperatura, sin que lleguen a cuajar.
Después lo llevamos al fuego unos 3-5 minutos, sin dejar de batir, hasta que vaya espesando. No debe llegar a hervir. Una vez listo, apartamos del fuego, pasamos por un colador para evitar hilos del huevo. y reservamos en el frigorífico hasta que enfríe.
Ahora vamos a montar las claras a punto de nieve. Batimos con unas varillas (puedes hacerlo con varillas eléctricas) unos 3 minutos, hasta que las claras formen picos firmes.
Es necesario cocer las claras para que queden formes y estables. Podemos llevarlas al microondas unos 20 segundos o ponerlas en una cazuela con un poco de agua, durante 1 minuto de cada lado.
Finalmente, hacemos un caramelo para decorar (ver receta del caramelo líquido aquí).
Para la presentación, ponemos en una copa un poco de la crema que preparamos al principio, colocamos encima un par de cucharadas de claras de huevo, formando como islas que flotan, y por último, decoramos con el caramelo a nuestro gusto.
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