Receta de tarta de sueca de chocolate
Aunque cupido hace tiempo pasó de largo por mi vida, no me resisto a dejar sin "celebrar" San Valentín, en ésta ocasión con éste pastel sueco de chocolate o Kladdkaka, totalmente adictivo e irresistible para los amantes del chocolate puro, he acompañado de una nota de color rojo intenso pasión añadiendo unas frambuesas, que combinan a la perfección y que dan una nota romántica a éste día ¿qué tendrán estas fechas que hasta los menos crédulos, volvemos a caer en sus redes?
Kladdkaka, significa en sueco "pastel pegajoso", y se trata de una especie de brownie aunque a diferencia de éste, no lleva levadura ni harina aunque hay opciones menos estrictas y si la llevan, la esencia de éste pastel es el chocolate.
Otra cosa que hace de éste pastel sueco o kladdkaka perfecto es la sencillez de su elaboración, en solo unos pocos minutos lo tenemos dispuesto para hornear y tras unos 40 minutos en el horno, podrémos disfrutar de él directamente caliente acompañado de crême fraîche o unos frutos rojos si nos gusta así mas fundente, o en frio si lo preferimos mas compacto y denso.
La fuente a la que he recurrido ha sido Linda Lomelino cuyo blog Call me cupcake, me tiene total y rendidamente enamorada.
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INGREDIENTES:
250 g. Mantequilla + un poco para el molde
250 g. Chocolate con un porcentaje de cacao del 70%
200 g. Azúcar
100 ml. Cafe expreso
4 Huevos L
1 Cucharadita de pasta o esencia de vainilla
1 Pizca de sal
Azúcar glass
Frambuesas
ELABORACIÓN:
Precalentamos el horno a 170º
Engrasamos un molde con mantequilla y colocamos papel de hornear.
Mientras en un cazo ponemos el chocolate troceado y la mantequilla y lo llevamos al baño Maria hasta que se derrita todo el contenido.
Añadimos entonces la pizca de sal y el café, removemos y reservamos.
Batimos los huevos con el azúcar hasta que la mezcla blanquee y doble el volumen.
Incorporamos la vainilla a los huevos y removemos con cuidado para que no baje la mezcla.
Mezclamos el chocolate y la mantequilla con el conjunto de huevos y azúcar con una espátula, con movimientos suaves y envolventes hasta estar todo bien integrado.
Volcamos sobre el molde engrasado previamente.
Horneamos alrededor de 40 minutos o hasta que veamos que se forma una corteza crujiente en la superficie.
Decoramos con azúcar glas y frambuesas.
Fuente: este post proviene de Yerbabuena en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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