En nuestro anterior artículo; "alimentación vegana: ¿es posible vivir sin alimentos de origen animal?", os contábamos que según diversos estudios una dieta vegana variada en la que se tomen una serie de medidas para evitar la carencia de determinados alimentos es perfectamente compatible con un estilo de vida saludable. Por el contrario, y según algunos estudios, si no tenemos en cuenta estas premisas, una dieta vegana puede provocar problemas cardiacos. Estos problemas no se suelen presentar en las dietas vegetarianas, en las que se incluyen algunos alimentos de origen animal, como productos lácteos y huevos. Sin embargo, en el caso de las dietas vegetarianas estrictas, o veganas, las precauciones ha adoptar son mayores, al ser esta una dieta basada en alimentos 100% de origen vegetal.
Una amplia revisión de diversos estudios, ha observado que las personas que siguen una dieta 100% vegetal tienen mayores probabilidades de desarrollar aterosclerosis y trombos, lo que supone a su vez un aumento del riesgo de sufrir patologías cardiacas. Si bien es cierto que el consumo de grandes cantidades de productos de origen animal, como la carne, provoca un aumento de los niveles de colesterol en sangre, la dieta vegana aporta a nuestro organismo una baja cantidad de vitamina B12 y ácidos grasos omega 3, lo que hace que la salud cardiovascular de los veganos pueda verse resentida.
La baja presencia de vitamina B12 en las dietas veganas puede provocar anemia megaloblástica, cuya sintomatología suele consistir en dolores de cabeza, cansancio, fatiga, úlceras bucales, palidez, falta de apetito y diarrea. Por su parte, la ausencia en la dieta de omega 3 puede afectar a la correcta circulación sanguínea. Una buena manera de aportar omega 3 en dietas vegetarianas estrictas es mediante el consumo de semillas como el lino.
La revisión de los estudios también concluyó diciendo que los veganos tienen altos niveles del aminoácido homocisteína, que suele estar asociado a diversas enfermedades del corazón. En cuanto a los niveles de colesterol HDL, se ha observado también que son inferiores en personas que siguen dietas veganas.
Por lo tanto, se recomienda que aquellas personas que sigan dietas vegetarianas estrictas lleven a cabo un consumo importante de frutos secos que son ricos en ácidos grasos omega 3, así como que incluyan en su alimentación algas en las que está presente la vitamina B12. En cualquier caso, se debe hacer una correcta planificación de la dieta. Si fuese necesario, se deben incluir complementos dietéticos para suplir las posibles carencias. Se pueden encontrar tanto suplementos de vitamina B12 como otros que son ricos en omega 3, de este modo los veganos reducirán los posibles problemas cardiacos que una deficiencia nutricional puede acarrearles.
Imagen: Flickr
Fuente: @vitonica, @wikipedia