Buenos días, la receta de hoy es de aprovechamiento, guise pollo y quedaron algunos trozos, podéis hacerlo también con pollo asado. Esta lasaña queda buenísima y jugosa, además de fácil.
No dejéis de prepararla porque os va a sorprender su resultado con tan pocos ingredientes.
Ingredientes:
1 paquete de pasta lasaña, yo utilice pasta de canelones.
1 plato de restos de pollo ya deshuesado, como unos 400 grs.
3 puerros.
1 calabacín.
250 grs, mas o menos de tomate frito.
1 paquete de queso rallado tipo 4 quesos.
2 cucharadas de harina.
1 vaso y 1/2 de leche.
Aceite de oliva, sal y pimienta.
Salsa bechamel para cubrir.
Elaboración:
Cocemos la pasta en abundante agua con sal, sacamos y escurrimos bien, reservamos.
Ponemos en una cazuela el aceite con la verduras y un poco de sal, las pochamos.
Añadimos las dos cucharadas colmadas de harina, cocinamos un poco y le vamos echando la leche hasta que veamos la masa cremosa, añadimos pimienta y rectificamos de sal.
Añadimos la carne y damos unas vueltas para integrarla bien, dejamos enfriar.
Montamos la lasaña poniendo en el fondo del molde unas gotas de aceite, ponemos las láminas de pasta, un poco de tomate frito y un poco de queso.
Seguidamente ponemos la masa de carne, pasta lasaña, tomate, queso, otra vez la masa de carne... así hasta terminar con un poco de bechamel que preparemos, receta aquí.
Metemos en el horno a 180 grados durante unos quince o veinte minutos y servimos.
Suelo hacer la lasaña de un día para otro, esta mas compacta y su aspecto al cortarla siempre tiene mas vista. Espero que os guste.
Fuente: este post proviene de mi taller de cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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