INGREDIENTES (Para molde de 18 cm)
Para la base:
170 grs de galletas digestive
80 grs de mantequilla
Para el relleno:
450 grs de queso crema
100 ml de nata (crema de leche)
100 grs de azúcar
60 grs de azúcar vainillado
30 grs de harina
2 huevos
Para el caramelo salado:
100 ml de nata (crema de leche)
75 grs de azúcar
25 grs de mantequilla
1/2 cucharada de sal
PREPARACIÓN
Trituramos las galletas y las mezclamos con la mantequilla derretida. Cubrimos el fondo y parte del borde del molde con esta masa de galleta ayudándonos de una cuchara. Metemos el molde al frigorífico mientras preparamos el relleno para que la galleta endurezca.
Con ayuda de una varillas batimos el queso con el azúcar y vamos añadiendo los huevos uno a uno sin parar de batir. Añadimos la harina y mezclamos bien. Finalmente añadimos la nata (crema de leche) y la integramos.
Vertemos el relleno sobre la masa de galletas y horneamos en el horno precalentado a 190º durante 40 minutos. *Pasado este tiempo lo apagamos y dejamos la tarta dentro una hora sin abrir la puerta del horno.
Preparamos el caramelo salado. Calentamos la nata (crema de leche) en el microondas y la reservamos. En un cazo a fuego medio-bajo ponemos el azúcar para que vaya formando el caramelo. Cuando adquiera un tono dorado añadimos la mantequilla, la sal y la nata (crema de leche) y lo volvemos a poner al fuego 2 minutos para que espese un poco (no ha de estar ni líquido ni espeso). Lo guardamos en la nevera durante mínimo una hora para que adquiera una textura más densa y cremosa.
Una vez haya enfriado el caramelo, cubrimos la tarta y la metemos en la nevera durante cuatro horas o mejor toda la noche.
*Este paso es opcional pero es recomendable para que le tarta no se nos se nos baje y para evitar que se agriete.