Ingredientes para las pakoras:
1/2 cebolla o cebolleta
1/2 calabacín
1 vaso de harina de garbanzos
1 vaso de cerveza sin alcohol
Sal y pimienta
Aceite de oliva
Ingredientes para el chutney:
1 mango o cualquier otra fruta dulce,, ¡y bien madura!
3 cucharadas de vinagre
Sal y pimienta blanca
3 cucharadas de azúcar moreno
Comino en grano
¿Cómo hacemos las pakoras?
1.Cortamos el calabacín y la cebolla en trozos muy pequeños y sofreímos en una sartén con aceite de oliva a fuego lento, hasta que estén bien pochados.
2. Salpimentamos, retiramos y dejamos escurrir en papel de cocina.
3. Hacemos un “rebozo” con harina de garbanzos y cerveza (que ayuda a que la mezcla se quede esponjosa).
4. Mezclamos las verduras y el rebozo (al que podemos añadir cualquier tipo de especia, como el perejil, el orégano, la albahaca…, si queremos darle un toque diferente.
5. Ponemos dos dedos de aceite en una sartén, para comenzar a freír nuestras pakoras.
6. Cuando el aceite esté caliente, con ayuda de una cuchara vamos cogiendo la mezcla de las verduras y el rebozo, e introducimos despacio en el aceite (como si estuviésemos haciendo buñuelos), hasta que se doren.
7. Una vez estén listos, vamos sacando de la sartén y dejamos escurrir en papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.
¿Cómo se hace el chutney?
Es recomendable que vayamos haciendo ambas recetas a la vez, ya que la idea del plato es que el chutney se tome templado y las pakoras calientes.
1.Cortamos la fruta en trozos pequeños (porque así se deshacen más facilmente) y colocamos en una cazuela.
2. Empezamos a cocinarlos a fuego lento.
3. Cuando vemos que empiezan a cocinarse y a deshacerse, añadimos el vinagre, subimos el fuego y removemos con una cuchara de madera.
4. Iremos removiendo progresivamente a medida que vamos viendo cómo se deshace la fruta.
5. Añadimos el azúcar moreno y removemos hasta que se haya deshecho.
6. Llegados a este punto comenzaremos a ver cómo se va formando una mermelada con trocitos de mango.
7. Añadimos sal, pimienta blanca, y removemos.
8. Cogemos un poco de comino en grano y lo colocamos en la palma de nuestra mano, lo molemos con ayuda de los dedos encima de la cacerola con la mermelada, y continuamos mezclando.
9. Seguimos removiendo hasta que veamos que tenemos una mermelada con trocitos de fruta (que si no os gustan los podéis retirar con ayuda de una cuchara o aplastarlos para que se deshagan con el resto de la mermelada).
10. Retiramos la mezcla y dejamos que se temple.
¡Presentamos, y a comer!
Fuente: este post proviene de Blog de Pineperpel, donde puedes consultar el contenido original.
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