Ingredientes
1/2 Kg. de hígados de pollo
2 dientes de ajo
2 vasos de vino generoso
1 vaso de whisky (blended)
4 lonchas de panceta ahumada
Trufa negra (opcional)
Pan rústico
Mantenquilla
Romero seco
Aceite de oliva
Sal marina
Pimienta Negra
Preparación del Paté de hígado de pollo:
Poner en una sartén los higados de pollo, le quitamos la grasa y los doramos con los dientes de ajo y retirados antes de que se quemen, una nuez de mantequilla y un hilo de aceite de oliva, le añadiremos unas agujas de romero, sal de mar y pimienta negra molida al instante, cuando ya están casi dorados, le añadimos dos vasos de vino generoso, yo prefiero un manzanilla de Sanlúcar de Barrameda (España), pero podeis usar lo que tengais a mano.
Una vez cocidos los híagsdo de pollo los pasamos por una trituradora o robot de cocina, hasta conseguir una masa suave, le añadimos un vasito de whisky y unas lonchas de panceta previamente salteadas y crujientes, volvemos a mezclar con la trituradora.
Vertemos el contenido en un molde rectangular para horno (preferiblemente de silicona) y lo ponemos a cocer una hora en baño maría, sobre una placa de horno con agua, después de completar la cocción dejaremos reposar el paté por una hora para que se asiente.
Alguna vez he abusado de mi golosidad y le he añadido al mejunje unas ralladitas de trufa negra, le dá un toque especial, si no queremos “invertir” en una trufa, podemos añadir unas gotas de aceite de trufa (es más barato) al servir las rebanadas de pan con el paté de hígado de pollo.
Tostamos unas rebanadas de pan “rústico”, y servirán para untar el paté y gozar enormemente.
Este Paté de hígado de pollo puede ser un óptimo aperitivo, una tapa y una entrada.