Ingredientes:
125 g vino blanco de mesa
125 g aceite de oliva virgen
Piel de 1 naranja
Piel de ½ limón
5 g sal
2 cucharaditas de anís en grano
1 cucharadita de ajonjolí
30 g manteca de cerdo
500 g harina normal
Aceite de girasol para freír
Azúcar para rebozar
Freír en el aceite la piel de naranja, la piel de limón, el anís en grano y el ajonjolí. A continuación pasarlo por un colador fino y dejar que se enfríe.
Mezclar el aceite con el vino y la sal. Añadir poco a poco la harina y amasar. Incorporar la manteca y seguir amasando unos 5 minutos con robot (unos 10 minutos a mano).
Formar una bola y colcarla en un cuenco untado con aceite y tapado con un paño. Dejar reposar a temperatura ambiente mínimo 1 hora.
En una superficie aceitada estirar bien con un rodillo hasta que tenga un grosor de 1 mm y cortar rectángulos de 10 x 5 cm
Calentar el aceite en un cazo profundo a 180ª y freír los pestiños hasta que estén dorados. Pasarlos a un plato con papel absorbente para escurrir el aceite sobrante y por último rebozar en azúcar.
Trucos / consejos / comentarios:
Nunca me habían gustado los pestiños... hasta que probé los de Julián. Su familia era de Almadén y desde pequeño veía cómo los preparaba su abuela. Normalmente se preparan en Navidad y en Semana Santa y parece que su origen es andalusí.
Los de Julián no tienen la típica forma de lazo porque se hinchan muchísimo al freírlos: se quedan casi huecos por dentro y con una capa finita, crujiente y tostada alrededor. Yo cuando empiezo no puedo parar... es más adictivo que comer pipas.Visita mi Twitter: https://twitter.com/Postreadiccion