Que los desayunos sean variados implican poner distintos tipos de bollería (mejor casera) en la mesa, junto con el zumo, la leche, los cereales, la fruta...Los que frecuentais este blog ya sabéis de mi debilidad por los bizcochos de yogur, y por las magdalenas. Pero no solo de magdalenas viven las familias, así que pensé que igual les gustaban tanto como a mi estos picatostes dulces, que los hacía la cocinera de mi primer trabajo, y oye, receta que se vino para la casa. A este tipo de preparación se le conoce también como tostada francesa, y hay quien las quiere equiparar a las torrijas, aunque ya os digo yo, que tengo un maestro torrijero en casa, que no se parecen ni en tiempo de preparación ni en mucho más allá de que se hacen con pan, leche y huevo. Pero este es otro debate, que si quereis reabriremos en Semana Santa.
De momento vamos con el vídeo y la receta para que probeis si no lo habéis hecho ya, y seguro que repetireis:
Ingredientes
Pan de molde (preferiblemente del día anterior, o que ya esté un poco seco)
leche
canela
huevos
azúcar
aceite
Proporciones a utilizar: 1 vaso de leche por cada 3 rebanadas de pan de molde.
Preparación
Cortamos las rebanadas de pan de molde en tres tiras (procurando que sean del mismo tamaño).
Mezclamos la leche con una cucharada de canela y la ponemos en un recipiente hondo, donde pondremos el pan para que absorba la leche.
Cuando el pan se haya bebido la leche con canela, batimos el huevo y ponemos aceite a calentar. Rebozamos los picatostes en el huevo batido y los freimos en abundante aceite.
Cuando ya tienen un bonito color dorado, los dejamos reposar sobre papel absorbente para que pierdan el exceso de aceite. Una vez reposados, colocamos en una bandeja los picatostes y los espolvoreamos con abundante azúcar por todos lados.
Dejamos enfriar por completo y ya estarán listos para servir en el desayuno o en la merienda.
Y si quieres que estén aun más rico, justo antes de servirlas riegalos con un chorrito de miel de flores. ¡Y a disfrutar del desayuno!