Lo mas común a la hora de preparar pollo en casa suelen ser tres formas fundamentales: a la plancha, empanado o asado. ¿Verdad? Seguramente todos hayamos preparado en casa en alguna ocasión alguno de los tres platos, sino los tres. Bueno, pues como ya os hemos enseñado en alguna publicación, el uso del pollo puede y debe ir un poco mas allá, aunque sea usando estas técnicas, pero variando la realización.
Ya os enseñamos la forma de preparar un rebozado para el pollo delicioso y crujiente en la receta Crujientes de pollo con cereales y almendras, o bien unos contramuslos con una salsa muy sabrosa: pollo al toque de nata (crema de leche) y limón. Pues hoy vamos a preparar el pollo de una manera que todos conocéis y que os he comentado anteriormente, como es el pollo rebozado, pero no de la forma tradicional, sino añadiendo algo que os va a encantar.
No recuerdo exactamente de donde cogimos la receta de este pollo a la milanesa, pero he de reconocer que fue todo un acierto el fijarnos en dicha receta. Fácil, con ingredientes que todos tenemos y con una presentación y un sabor muy muy característico. Comida ideal para hacer en cualquier momento, tanto para niños como para mayores, y que acompañado de una buena ensalada o patatas, convertirán la comida en un verdadero lujo. Imaginaros: un filete de pollo rebozado con un toque cítrico, acompañado de una salsa de tomate con jamón y al horno para gratinar un poco de queso y jamón de york. ¿No se os hace la boca agua? A nosotros si, con solo pensarlo...
Ya vamos a comenzar con los ingredientes y los pasos para que todos podáis realizar este gran plato en vuestras casa. Tod@s con los delantales puestos y manos a la obra!
Ingredientes(2 personas):
2 filetes de pollo
1 brick de tomate frito
1 diente de ajo
100 gr de jamón serrano partido en trozos pequeños o en tacos
Ralladura de medio limón
Pan rallado
1 huevo
4 lonchas de jamón de york
Queso rallado para gratinar
Preparación:
En un plato, rallaremos el medio limón y lo mezclaremos con pan rallado, moviendolo para que se distribuya bien la ralladura.
Salamos ligeramente los filetes y los pasamos por el huevo batido y por la mezcla de pan rallado y limón. Los freiremos en una sarten con abundante aceite hasta que estén dorados. Sacamos y los dejamos escurrir sobre papel absorbente.
En otra sarten, con un poco de aceite a fuego medio-bajo, doraremos un poco el ajo partido en trocitos pequeños.
Cuando este dorado, verteremos el jamón serrano para que se tueste un poco. Echamos el tomate frito bajando un poco el fuego y lo removeremos bien unos minutos para que no se nos pegue.
Precalentamos el horno a 200º con calor arriba y abajo.
Verteremos el tomate con el jamón en una fuente apta para horno. Encima, distribuiremos los filetes de pollo y encima de estos, pondremos las lonchas de jamón de york y queso rallado.
Meteremos en el horno unos minutos hasta que veamos que el queso esta a nuestro gusto: podemos gratinarlo o sacarlo cuando se derrita, eso al gusto de cada uno.
Servimos caliente.
Ya habréis comprobado que sencillez de plato, y lo tremendamente bueno que está. Probarlo, porque solo así sabréis a que me estoy refiriendo.
Un saludo a tod@s y buen provecho!
Fuente: este post proviene de Los Delantales de Julio y Carmen, donde puedes consultar el contenido original.
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