El pollo satsivi es un plato muy popular en Rusia, es de origen georgiano, donde es el plato nacional. La protagonista de este plato es la salsa de nueces, que resulta una delicia combinada con la cebolla y el picante, lo que hace el pollo de lo más jugoso.
Este guiso, en cierto modo recuerda a nuestro pollo en pepitoria, lo suelen preparar con pollo o pavo, es típico tomarlo frío, en picnic y en navidad no suele faltar. Lo elaboran con una base de caldo de pollo muy concentrado, por ello he utilizado caldo de puchero Aneto, si no tenéis a mano podéis poner caldo casero que es bien rico.
Mi adaptación puede que no sea auténtica, ellos utilizan cilantro en lugar de perejil, pero somos de los que no podemos con el cilantro, pero no os preocupéis que con perejil queda fantástica, se prepara rápidamente y es muy sencilla.
INGREDIENTES: 2 muslos de pollo deshuesados, una cebolla, 1 cucharada de harina, sal y pimienta, 1 vaso de caldo de pollo de vuestra preferencia (hoy he puesto caldo de puchero Aneto) y aceite de oliva Aove.
Para la salsa satsivi: 1 puñado de nueces, 2 dientes de ajo, perejil o cilantro, guindilla a gusto, 1 vaso de caldo de pollo y zumo de medio limón.
ELABORACIÓN:
En un procesador de alimentos o en la trituradora ponemos las nueces, el perejil, el chile, los ajos, el jugo de limón y 1/2 vaso de caldo de pollo y trituramos hasta que quede una una pasta suave. Lo reservamos.
En una sartén ponemos aceite de oliva y doramos el pollo salpimentados a fuego medio. Lo reservamos en un plato.
En la sartén dejamos como 2 cucharadas de aceite, ponemos a pochar la cebolla picada a fuego lento hasta que esté transparente. Añadimos la harina y movemos bien para cocinarla , cuando tenemos el roux, añadimos el caldo poco a poco moviendo para que se suelte la harina, lo dejamos hervir y se baja el fuego, añadimos la pasta de las nueces y mezclamos bien.
Ponemos el pollo en la sartén, dejamos que hierva y bajamos el fuego para que cocine a fuego lento durante 30 minutos sin tapar para que la salsa quede consistente.
Antes de servirlo espolvoreamos con perejil o cilantro, y si queremos un toque crujiente, le ponemos unas nueces enteras. Lo acompañamos con arroz blanco.