El arroz con leche es el postre por excelencia. Que levante la mano quien no lo ha probado nunca o no lo ha visto a la mesa en casa de la abuela como postre. Y no se trata sólo de una receta del ámbito nacional, esta elaboración es fácil de encontrar mucho más allá de nuestras fronteras.
A mi, particularmente, me encanta. No suelo hacerlo mucho pero debo de reconocer que es de mi favoritos. Mi madre suele hace una preparación que es el arroz con leche portugués, que incorpora unas yemas de huevo al final de la cocción, lo que hace que quede entre la textura del arroz con leche tradicional y la natilla. Vamos, una delicia. Sin embargo y puestos a hacer confesiones, debo de admitir que no me gusta nada la leche. Creo que por ningún motivo podría beberme un vaso de leche a secas. Y a pesar de eso, adoro cualquier producto lácteo, dícese natillas, yogures, cremas y sobre todo, queso, pues en otra vida debo haber sido ratona.
No hace mucho, me mandaron a casa un paquete de productos de la marca Provamel, que son orgánicos, 100% origen vegetal, bajo contenido en grasas, sin azúcares añadidos y obviamente libres de lactosa. Elaboran una serie de productos muy llamativos, como leches de arroz, almendra y aromatizan, además, éstas con otros sabores, como piña, coco. Así que decidí darle una oportunidad a esta alternativa a la leche de vaca y el resultado ha sido muy positivo. Mi animadversión a tomarme un vaso de leche tal cual ya es innato pero iré progresando adecuadamente.
Y puestos a innovar, he buscado la manera de convertir ese postre típico de nuestras abuelas y madres en polos, para refrescarnos del calor que estamos teniendo y del que se avecina. He tardado en dar con la receta perfecta, pues he ido adecuando cantidades hasta dar con un arroz con leche de arroz (valga la redundacia) y coco óptimo para su congelación. De hecho, no llega a cristalizarse del todo. El resultado es un polo cremoso de textura suave y con un toque muy especial.
Ingredientes
700 leche de arroz y coco provamel (o en su defecto, leche entera de vaca)
120 g. de arroz
90 g. de azúcar (120 g. si lo haces con leche de vaca)
35 g. de mantequilla
La cáscara de medio limón
Canela en rama
* Si no encuentras este tipo de leche o eres de los que prefieres la de vaca, yo añadiría unas gotas de esencia de coco al preparado.
Pon a hervir en un caso la leche junto con el azúcar, la canela y la cáscara de limón. Cuando esté a punto de romper a hervir, añade el arroz y baja a temperatura media. El proceso debe de durar entre 25-30 minutos. Es fácil de hacer pero hay que estar vigilando para que el arroz no se pegue al fondo así como que no se nos agote la leche.
Cuando el arroz esté casi hecho, añade la mantequilla y remueve. Retira del fuego en el punto en que casi no quede leche, es decir, que sea más una masa homogénea que caldosa. Quita la rama de canela de la preparación. Necesitamos este punto para poder hacer los polos de arroz con leche de coco.
Espolvorea canela en el fondo del molde de polos.Reparte el arroz con leche y deja que se enfríe completamente, antes de congelarlos.
Congela y disfruta del sabor tradicional en un nuevo formato de presentación. Puedes espolvorear con canela cuando los sacos de los envases o incluso con coco rallado.
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